Mohedano deja atrás el año de su lesión soñando con "una medalla en Río"

"Superé esa lesión en el tobillo al cabo de unos meses en los que primero sufrí viendo entrenar a mis compañeras de la selección y luego compitiendo. Tenía un sentimiento de impotencia porque no me había pasado antes y las ganas de incorporarme eran grandes", ha manifestado Mohedano en una entrevista con Efe.

Mohedano dejó atrás su lesión en el tobillo, con el que había competido infiltrado durante casi año y medio, consiguiendo entre otros logros con el equipo español el título mundial de 2014 en diez mazas en Kiev (Ucrania), y lo hizo reapareciendo en mayo sumando la medalla de plata en la Copa del Mundo de Tashtkent (Uzbekistán).

"Luego lo terminamos logrando la clasificación para mis segundos Juegos Olímpicos y con el bronce en el concurso general en el Mundial de Stuttgart (Alemania). Lo primero era el objetivo, así que no le puedo pedir más al 2015, un año que definiría como el de la ilusión", ha subrayado Mohedano.

Ahora la gimnasta cordobesa confía con que 2016 "recompense al equipo nacional con una medalla de Río de Janeiro y los mayores logros para el resto de la delegación española".

"Yo bailo con el corazón para que mis pies me sigan. Lo que más me gusta de la gimnasia es sentir la música y transmitir lo que siento al público. Por ello siempre le pongo pasión con el cuerpo y mi rostro", ha destacado la cordobesa, cuyo reto día a día es "disfrutar al máximo en cada entrenamiento, cada ejercicio y cada competición internacional" con España.

Bajo esas premisas Lourdes Mohedano, que fue la benjamina de toda la delegación española en Londres 2012 cuando solo tenía 17 años, aspira ahora a ver hecho realidad su sueño tras conseguir ya un diploma olímpico en la cita londinense, de ahí que no se canse de repetir que su "motivación" diaria para competir "es llegar a Río y lograr la medalla".

Así despedirá 2015 la cordobesa más laureada del siglo XXI, ya que desde 2012 aglutina más de 20 preseas internacionales, aunque como ella misma dice le falta la más preciada para que la puedan llamar la coleccionista de medallas del Club Liceo de Córdoba, donde se formó cuando empezó en el mundo de la gimnasia rítmica cuando tenía sólo 7 años, de ahí que ahora a sus 21 años quiera poner el broche final a su carrera.