Marta Gómez: "Llego a Río en mi mejor momento"

Criada en el barrio sevillano del Arenal, volverá a competir en unos Juegos Olímpicos tras hacerlo en Londres 2012, donde no pudo dar todo al no incluirse su prueba fetiche: los 400 libres. En 2013 arrasó en el Campeonato de España consiguiendo liderar 5 pruebas en la categoría S13 y este año ha logrado la mínima B para poder estar en Brasil. Con 20 años decidió cambiar Sevilla por Madrid para aumentar su rendimiento y mejorar sus marcas personales. Compaginando los estudios con el entrenamiento continuó su carrera en el CAR de Madrid y allí se graduó en Trabajo Social. Batelli llega ahora más rodada a la cita olímpica tras la experiencia cosechada en Londres y sueña con poder subirse al podio y conseguir una medalla para la natación española.

- Ya es la segunda vez que va a estar en unos Juegos. ¿Qué sensaciones tiene?
Ya sé lo que son los Juegos, he estado trabajando durante 4 años muy concienzudamente para llegar a Río en mi mejor estado de forma. Estoy en mi mejor momento. Mi visión es la de dar allí lo mejor de mí y hacer una gran competición.

- ¿En qué pruebas va a competir en Brasil? ¿En cuáles se ve con más opciones?
Este año voy nadar los 50, 100 y 400 libres y el 200 estilos. El 400 es en la que me veo con más opciones, es la prueba que estoy preparando y en la que he centrado mi trabajo en los últimos años. El día 10 nado en 200 estilos, el 12 en mi prueba principal: los 400; el 14 en los 50 libres y el 16, último día de competición para mí, en el 100.

- En 2011 consigue en Berlín la medalla de bronce en 100 libres y 200 estilos; en el Mundial de Montreal acaba 2ª en el 400 libres... ¿A qué se debe ese cambio de distancias?
No ha sido un cambio que yo haya querido hacer. El 400 siempre ha sido mi prueba pero en Londres el calendario no ofreció la prueba para mi categoría, por lo cual me vi obligada en un año a cambiar de distancia, y por eso nadé los 100. Después de los Juegos supimos que ya podría competir en los 400, así que volví a la preparación de esa distancia. El 400 siempre ha sido mi prueba, es la que me gusta. No soy una nadadora velocista, entonces me van más las pruebas de fondo.

- ¿Cómo define sus características como nadadora?
Tengo mucha resistencia, soy capaz de mantener un ritmo alto durante un tiempo prolongado. Quizás no soy tan explosiva como pueden ser las nadadoras de distancias cortas. Mi punto fuerte es el segundo 200, que es donde mis rivales suelen sufrir más y, sin embargo, yo tengo un buen final.

- Tras disputar el Mundial de Eindhoven, en 2011, dejó el Club Náutico de Sevilla y se marchó a estudiar y entrenar al CAR de Madrid; ¿qué supuso ese cambio?
He entrenado toda mi vida en el Club Natación Sevilla hasta que se produjo el cierre definitivo del club. A principios de 2013 fiché por el Náutico. En septiembre de 2011 fue cuando decidí trasladarme al CAR de Madrid para preparar los Juegos de Londres, ya que en Sevilla, desgraciadamente, no tenemos piscinas climatizadas de 50 metros. Es fundamental para nuestra preparación. Ese fue uno de los principales motivos por los que me tuve que ir a Madrid. Fue un cambio muy difícil por la adaptación durante los primeros meses porque, de entrenar con mis compañeros y amigos de siempre en un club muy concurrido, en un grupo convencional sin ningún tipo de discapacidad, pasé a entrenar dos veces por día, más entrenamiento en seco, con trabajos más específicos y con un grupo más reducido. Las condiciones de entrenamiento eran mucho más difíciles. El cambio de ciudad, de Sevilla a la capital, fue muy duro, mi vida cambió radicalmente, fue como empezar de cero. Tuve que cambiar de compañeros, de entrenador, de vivienda y de universidad. Empecé en Sevilla mi carrera de Trabajo Social y la terminé en Madrid, donde compaginaba el entrenamiento con los estudios.

- Junto a su entrenador Iñaki Urra, ¿cómo preparan los últimos días antes de esta cita?
Estamos empezando a afinar nuestra puesta a punto, a bajar nuestro volumen de trabajo. Ahora lo importante es cuidarse muchísimo, vigilar todos los detalles, como el descanso y la alimentación. Nos preparamos a conciencia para llegar en las mejores condiciones al 12 de septiembre, que es cuando compito en mi prueba principal. Hay que observar cada detalle entrenando, no despistarse y sobre todo cuidarnos en nuestro tiempo libre. Es importante no dejarnos llevar por la emoción y ser constante.

- Ha habido algunos deportistas que se han quejado de las instalaciones en Río y la organización ha tenido que vaciar algunas piscinas porque el agua se puso verde, ¿qué espera de Brasil en general?
Sé que no va a ser igual que en Londres porque esos Juegos fueron espectaculares y el nivel de las infraestructuras fue muy bueno. Nos han dicho que estos Juegos no estarán a la altura de los anteriores. De todas formas, no dejan de ser unos juegos, el máximo evento deportivo al que cualquier deportista aspira a llegar. Aunque las instalaciones no sean idóneas, con que la piscina esté en buenas condiciones y tengamos una habitación donde podamos descansar y un comedor donde nos ofrezcan la alimentación que debemos llevar es suficiente. Si tenemos cubiertas nuestras principales necesidades a mí me vale porque el evento va a seguir siendo el mismo. Llevamos entrenando cuatro años para esto como para dejarnos llevar por esas críticas que nos puedan llegar. Tengo la ilusión intacta a pesar de lo que nos pueda llegar de Río.