Rafa Muñoz confiesa que intentó suicidarse

Rafa Muñoz se sinceró, abrió su corazón en el programa radiofónico de 'El Partidazo' de Cope. El nadador cordobés narró su calvario tras tocar el éxito. Alcohol, depresión e, incluso, intento de suicidio cuando lo tenía todo a nivel deportivo. Precisamente todo comenzó cuando consiguió su primer gran hito, ser plusmarquista mundial de los 50 metros mariposa: "Tengo grabado a fuego cuando al día siguiente tengo 123 llamadas perdidas de medios de comunicación. Mucha gente encaja bien el éxito y yo no lo encajé", afirmó.

Su éxito fue su tumba como nadador profesional, de la cima deportiva al suelo en el plano personal. La juventud, tenía solo 20 años, le jugó una mala pasa, no disponía de la "madurez suficiente para asumir la repercusión mediática". "Si no te han formado o asesorado, es duro. Me lo fui tragando. Te encierras tanto en el deporte que caes en ese pozo depresivo. Había estado sin nadar 15 días antes del Mundial de Roma y me fueron a ver mis padres porque no quería competir", enfatiza.

Precisamente, su segundo gran logro deportivo llegó en el Mundial de natación de Roma, el nadador cordobés se alzó con dos bronces en los 50 y 100 metros mariposa. Un hito para la natación española, que no supo o, mejor dicho, no pudo aprovechar Rafa Muñoz: "Empiezo a salir, a no estar pendiente de lo que tenía que estar. Me llegaron tres amonestaciones porque no rellenaba dónde iba a estar para los controles antidopaje. Mis vacaciones se extendieron cinco meses y bebiendo", así el nadador cordobés se vio obligado a "declarar ante el TAS. La única forma de que me quitasen esa amonestación era por mi cuadro depresivo".

Fueron cinco meses sumidos en una depresión absoluta, Rafa Muñoz intentó suicidarse y acudió a un psicológico para solventar la situación: "Fueron cinco meses de mi vida los que bebí, pero no he vuelto. Intenté suicidarme dos veces. Al final uno tiene sangre y cabeza, y me tuve que poner en manos de un profesional. Cuando te pones en manos de un psicólogo empiezas a asimilarlo y te das cuenta de que has sido un capullo", explicó.

Después nada volvió a ser igual para Rafa Muñoz a nivel deportivo. Sin presencia en el Mundial de Shangái de 2011 ni en los Juegos Olímpicos de Londres de un año posterior. No consiguió la mínima para ninguno de los dos eventos, por lo que el cordobés no acudió a la cita olímpica a pesar de que logró el oro en los 50 metros en el Campeonato de Europa: "Me dicen que no tengo nivel para ir a unos Juegos, sólo cuatro horas después de ser campeón. Entonces se me cae el alma al suelo. Me quedé en mi casa". En este sentido, conviene recordar que la prueba de 50 no forma parte del programa olímpico, aspecto que sí cumplen los 100 metros.

Su última gran evento deportivo tuvo lugar en el Mundial Barcelona en 2013, Rafa Muñoz se quedó a un paso de acceder a la final. Ahora, disfruta de la vida alejado del deporte a nivel profesional junto a su hijo y su mujer. El cordobés, de 28 años, piensa presentarse a las pruebas paras ser Mosso d'Esquadra. "Yo sigo nadando, me sigo manteniendo en forma, pero no voy a nadar sin un objetivo. Acabé muy harto", sentencia.