El frenético desenlace del grupo B del Mundial de Rusia -en el que se encuentra España- con una decisiva actuación del VAR dando por válido un gol de Iago Aspas y señalando un penalti a favor de la Selección de Irán, provocó que el combinado nacional finalizara la fase de grupos como primera, lo que le colocó en el
enfrentamiento de octavos a la selección rusa.El partido, que tendrá lugar el domingo a las 20:00 de la tarde en el estadio de Luzhniki, tendrá como principal objetivo para "La Roja"
romper la mala racha frente a los equipos anfitriones. A pesar de que, las estadísticas están para romperlas, llama la atención el increíble gafe de la selección ante los países organizadores del evento.
Tendríamos que remontarnos al año 1934 para asistir al primer enfrentamiento de España frente a un equipo anfitrión, cuando un escandaloso
gol de Giovanni Ferrari eliminaría al combinado nacional del Mundial de Italia.El siguiente precedente sería el
Mundial de Brasil en 1950, cuando, en el Estadio de Maracaná cayó por 6-1 ante la canarinha, que acabaría cayendo derrotada en la final ante Uruguay en lo que se conoció como el
Maracanazo.
En lo que respecta a las Eurocopas,
en el año 1980 España empató sin goles en el Giuseppe Meazza ante Italia en un torneo que acabaría conquistando la selección de Alemania Occidental.
El siguiente precedente sería especialmente doloroso, puesto que la selección, dirigida por Miguel Muñoz, se plantó en
la final en 1984 ante Francia, cayendo por 2-0 con un gol de Michel Platini recordado por el error de Arconada.
En la
Eurocopa que organizó la República Federal Alemana en 1988, España se enfrentó a los anfitriones en el Grupo A, cayendo por 2-0 gracias a un doblete de Rudi Völler.
En el año 1996, España llegó como uno de los aspirantes a campeonar en la Eurocopa de Inglaterra, sin embargo, en cuartos de final se topó con el equipo anfitrión, cayendo derrotada por 4-2 en los penaltis, tras empatar a cero durante los noventa minutos reglamentarios y los treinta de prórroga.
Tras esto, llegamos a uno de los partidos más traumáticos de la historia del combinado nacional, en el
Mundial de Corea y Japón del año 2002, donde una actuación del colegiado egipcio Gamal Al-Ghandour, anulando un gol legal de Rubém Baraja, y la lotería de los penaltis echó a La Roja del Mundial.
Por último,
en el año 2004, un gol de Nuno Gomes hizo que Portugal se impusiera a España por 1-0 en una fase de grupos en la que la Selección no fue capaz de pasar de ronda.
Por ello, España deberá andarse con pies de plomo en su encuentro frente a Rusia, puesto que no solo tendrá como rival al combinado ruso, sino que además deberá vencer al gafe frente a los equipos anfitriones.
José Gómez4 min lectura