De uno en uno no se llega a Europa, aunque tus rivales sigan pinchando. El Sevilla desaprovechó una nueva oportunidad de meterse de lleno en la lucha por alcanzar la Europa League tras empatar en Valladolid en un partido que dominó, en el que tuvo las mejores ocasiones, pero que estuvo a un paso de escapársele por culpa de los errores habituales. Al menos salvaron un punto gracias a un penalti transformado por el ´pichichi´ español: Álvaro Negredo.
Con la novedad de Hervás en el once por primera vez en la temporada y la ausencia de Alberto Moreno, que dejaba la banda izquierda sin profundidad, Unai Emery intentaba acabar con la sangría fuera de casa y romper un maleficio que afecta al Sevilla desde el mes de septiembre.
Sin embargo, poco pareció cambiar de salida con respecto a los partidos anteriores. Los primeros quince minutos rememoraron lo tantas veces visto, últimamente ante el Mallorca o el Levante. El balón era del Sevilla, aunque sin nada de mordiente, mientras su rival, que ofrecía poco o nada, aguardaba para dar el zarpazo. Los de Emery, que tenían la posesión, pero ni ofrecían continuidad en el juego ni sabían qué hacer con el balón con un Maduro y un Hervás que no ofrecían garantías, y con sólo una banda en funcionamiento, la de Navas, eran más que previsibles. Sólo lograban crear verdadero peligro a balón parado, en unos lanzamientos que siempre buscaban a Fazio.
Y si en los primeros minutos, el Sevilla al menos tenía el balón, a partir del primer cuarto de hora ni eso. El Valladolid, casi sin recursos, tampoco quería llevar el peso del duelo. Así, el partido se volvió insufrible, jugándose todo en el centro del campo y con apenas llegadas a una y otra área. Sin embargo, cuando parecía más dormido apareció la calidad nervionense. En una jugada trabada, Navas cogió un balón en la frontal que Jaime sacó de la escuadra después de una gran estirada (28´) y, poco después, fue Fazio (35´) el que obligaba al meta pucelano a sacar otro balón, esta vez abajo, con otro disparo desde el borde del área.
El Sevilla se venía arriba y se aventuraban unos minutos finales de la primera mitad de acoso, pero en una jugada por banda derecha, Rakitic perdió en balón, se montó una contra rápida bien llevada por Óscar, que encontró continuidad en Ebert y la culminación por velocidad de Javi Guerra, que superó a los defensas nervionenses. El delantero de Vélez Málaga, solo ante Palop, lo batía por alto. Era la primera llegada del Valladolid (40´) y, como en las salidas anteriores del Sevilla, ya perdía.
La incredulidad de los de Emery al descanso era evidente. Otra vez habían hecho, al menos, lo justo para no perder y otra vez se veían por detrás en el marcador.
Al menos el descanso frenó el decaimiento moral de los sevillistas, que salieron con otro bríos de las caseta. Al minuto, Negredo no controló por poco un pase en largo en el que había superado a sus defensores; en el 54´, el propio vallecano, solo ante Jaime, remata de cabeza al ´muñeco´ tras un centro preciso de Jesús Navas; en el 57, era un defensa el que sacaba un remate en el segundo palo del palaciego€ Ahí, Emery dio un paso más al sacar a Alberto Moreno por Cala y empezó a utilizar las dos bandas en ataque.
Y al minuto (60´) del cambio se encontró con un penalti por mano del ex sevillista Marc Valiente que Negredo no desaprovechó al batir por el centro a Jaime. Era obra de una internada de Coke. Los laterales desequilibraban, como a Emery le gusta.
El técnico guipuzcoano dio otra vuelta de tuerca y sacó a Perotti por un Hervás que había acusado en demasía la falta de minutos en la categoría y retrasó a Rakitic. El Sevilla, que también había ´recuperado´ a Reyes en esta segunda parte, ponía en liza su equipo más ofensivo.
Ante esto, el Valladolid reaccionó con lo único que tiene: Ebert. El alemán, en dos minutos, lanzó un disparo al larguero y obligó a Palop a atajar un balón con dos disparos desde fuera del área. Era un aviso de que las contras pucelanas podían ser letales. Pero eso no intimidó al Sevilla, que tenía que ganar por obligación para alcanzar su objetivo, y se fue a por el marco de Jaime. Con Perotti saliendo desde el centro con velocidad, todos los balones acababan en los pies de Negredo, que no estaba especialmente acertado.
El ´9´ sevillista lanzó desde la frontal rozando el poste en el 70 y dos minutos después tuvo la gran ocasión de adelantar a su equipo cuando, tras un pase en profundidad del argentino, llegó solo ante Jaime, aunque muy forzado, y sólo alcanzó a meter el pie para lanzar fuera. El meta ciudadrealeño del Valladolid aún le tuvo que sacar otro disparo cruzado a Navas; un cabezazo centrado al omnipresente Negredo€
Todo era optimismo cuando acechó la tormenta. En el 81´, Javi Guerra pudo ofrecernos una muestra más de ls mala fortuna que suele acosar al Sevilla este año cada vez que ve el horizonte despejado a domicilio. Tras un centro de Ebert tuvo el balón franco para empujarlo a una portería vacía, pero el esférico acabó en la grada.
El miedo generado igualó las fuerzas y el partido se dirigió hacia su epílogo con jugadas aisladas y sin peligro, y en el que los balones colgados al área, ya con Israel Puerto sobre el campo, eran vitales. Al final, reparto de puntos que frena al Sevilla y acerca al Valladolid a su objetivo.
La lesión de Reyes, que se marchó con claros síntomas de dolor, fue lo peor. Su baja podría ser un duro contratiempo en esta recta final de temporada.
Ficha Técnica:
Valladolid: Jaime; Rukavina, Rueda, Valiente, Balenziaga; Ebert, Rubio, Víctor Pérez, Larsson (Bueno, min. 65); Óscar y Javi Guerra.
Sevilla F.C.: Palop; Coke, Fazio, Cala (Alberto, min. 58), Navarro; Navas, Maduro, Hervás (Perotti, min. 64), Reyes (Israel Puerto, min. 87); Rakitic y Negredo.
Goles: 1-0 ( 40´) Javi Guerra; 1-1 ( 61´) Negredo, de penalti.
Árbitro: Undiano Mallenco (navarro). Amonestó a Cala y Hervás del Sevilla; y Marc Valiente y Ebert por parte del Real Valladolid.
Incidencias: Encuentro disputado en el estadio José Zorrilla ante 16.832 espectadores.
José López8 min lectura