Se ha hecho de rogar; parecía que no iba a llegar nunca y que la temporada del
Sevilla sería un absoluto desastre, a la altura de las dos anteriores o, incluso, peor. Sin embargo, a sólo cinco jornadas para el final de la
Liga, el conjunto nervionense llega al momento que lleva esperando todo el curso: el ideal para volver a ser un ´grande´, conquistar un puesto de
Champions y desplazar al
Athletic, que, justo esta semana, cumple una vuelta sin abandonar la cuarta plaza. Los bilbaínos llevan desde la jornada 19 en el ´Top 4´ de manera ininterrumpida y, desde el segundo encuentro del campeonato, no han salido de las posiciones europeas, una privilegiada zona de la clasificación a la que los de Eduardo Dato no han logrado acceder hasta hace únicamente cinco encuentros.
La remontada y la persecución a los ´leones´ por parte de los pupilos de
Unai Emery está siendo histórica. Sin embargo, los vascos no aflojan, no dan muestra alguna de debilidad y mantienen un colchón de seis puntos para conservar su estatus, con sólo 15 por disputar. Cada vez queda menos margen de maniobra, pero el
Sevilla tiene un plan para eliminar en sólo dos semanas esa distancia y lograr depender de sí mismo en las tres últimas fechas ligueras. Un guion que se basa en tres pasos. En primer lugar, que se queden en el
Ramón Sánchez Pizjuán los tres puntos en juego este domingo ante el
Granada. El segundo término pasa por esperar a que el
Barcelona haga un ´favor´ y derrote al
Athletic en el choque que ambos disputarán este fin de semana en el siempre complicado
Camp Nou; algo esencial para que sea posible alcanzar el tercer punto de la hoja de ruta: el de llegar al decisivo duelo del 27 de abril (jornada 35) en el
Nuevo San Mamés a sólo tres puntos de distancia, vencer allí al Athletic y empatar a 62 puntos, con el ´goal-average´ a favor de los hispalenses, tras el 1-1 registrado en Nervión en la primera vuelta.
El calendario a partir de ahí sonríe a los sevillistas, a los que les quedan dos partidos en casa, ante
Villarreal y
Elche, y uno fuera, frente al
Getafe. Peor lo tienen los rojiblancos, que deben afrontar salidas a
Vallecas y a
Almería, así como disputar como locales el siempre igualado derbi vasco contra la
Real. Todo ello deben hacerlo los blanquirrojos sin perder de vista al
Valencia para sellar su clasificación matemática para disputar competiciones europeas la próxima temporada. El conjunto che está ahora a 12 puntos del
Sevilla, con 15 en juego, pero ganan el duelo personal (3-1 y 0-0). Esto quiere decir que los de Nervión necesitan sumar tres puntos más, o cuatro al menos, en el caso de que los de
Pizzi firmen un pleno. Una situación que muchos verían imposible cuando los sevillistas cerraban la clasificación de
Primera en la jornada cinco.