El
Stadion Kantrida de
Rijeka adquiere esta tarde silueta de centro terapéutico para un campeón con deseos de olvidar su pasado más reciente y retomar las sensaciones de un arranque de campeonato que suscitó máxima ilusión en las huestes nervionenses. El Sevilla se sentará hoy en el diván para enterrar el episodio sufrido en el Vicente Calderón, donde la traición a su propia personalidad se erigió en su principal enemigo, y
recuperar la confianza con un golpe de autoridad que, a su vez, le permita
consolidar su favoritismo en el Grupo G tras imponerse en la primera jornada al
Feyenoord.
Una actuación convincente para aislar lo ocurrido, un tropiezo que cuadra en los planes de la lógica y que, aunque no fuera de la forma deseada, llegaría tarde o temprano.
Un partido protagónico para instalarse de nuevo en la línea marcada hasta entonces y continuar con la construcción de una idea futbolística sobre los pilares de un bloque sólido.El rival, sobre el papel, se presenta propicio para esta terapia reconstituyente.
Un Rijeka con el rol de ´cenicienta´ en el cuarteto, técnicamente muy inferior a los nervionenses y que ya cayó en la estreno con el Standard de Lieja. No obstante, los croatas encaran esta cita con la
siempre peligrosa arma de la ilusión y de jugar sin ninguna presión. Ellos, fuertes en su feudo, repiten una y otra vez que no tienen nada que perder y que sólo recibir al Sevilla ya es un premio, cediendo la presión a un cuadro blanquirrojo que está obligado a ganar y firmar el pleno.
El guión exige un triunfo y también proyectar en el verde su indiscutible superioridad en calidad, independientemente del once que despliegue en el estadio balcánico. En este sentido,
se espera que Emery continúe con su política de rotaciones e introduzca numerosas novedades en el once con respecto al partido anterior, lo que convierte en harto complicado predecir el equipo en tierras croatas. Más allá de la portería, en la que repetirá
Beto, habrá modificaciones en todas las líneas, incluida la delantera, intocable hasta el momento. Y es que Emery dejó caer ayer que podría dar
descanso a Bacca en favor de Aspas, que debutaría como titular en el Sevilla. Por detrás, apunta la segunda línea usada contra el Feyenoord, con
Reyes, Banega y Deulofeu, mientras que existe la duda de quién acompañará en el
doble pivote a Iborra, pues Krychowiak acumula muchos minutos.
Atrás, cabe la opción de que Unai le devuelva el puesto a
Coke y le ofrezca minutos a
Fernando Navarro, correspondiendo el centro a ´
Kolo´ y
Carriço o Pareja, ya que el técnico prácticamente descartó la titularidad de
Arribas, citado por primera vez. Mimbres, en definitiva, para regresar del viaje terapéutico con el autoestima completamente restablecida, aunque, para ello, debe ceñirse a su carácter combativo para, a partir de ahí, imponer su supremacía.