El 'Fair Play Financiero' instaurado por la LFP impone a los clubes un determinado límite salarial de plantilla que, en el caso del Sevilla, es de 78,6 millones de euros. En este sentido, el nervionense es el cuarto español, tras Barcelona, RealMadrid y Atlético, demostrando, así, su potencial.
Villanueva Ruiz-Mateos explicó que, un ejercicio más, las ventas de jugadores como Rakitic, Alberto o Fazio han vuelto a ser la clave "para equilibrar el presupuesto y mantener un plantel de alto nivel competitivo".
En esta línea, redundó en ese discurso tan repetido por Castro y Monchi de que "el dinero está sobre el campo, en sueldos". Según los datos facilitados, los emolumentos de la primera plantilla suman 50,83 millones, cifra a la que deben unirse amortizaciones por valor de 18,3 más, obteniéndose un coste total de más de 71 millones. Es decir, que la entidad nervionense está capacitada para acudir al mercado invernal en busca de refuerzos, ya que aún dispone de un margen de cerca de ocho kilos hasta alcanzar su tope salarial.