El diagnóstico realizado por la precisión matemática de los resultados revelan que el Espanyol de
Sergio González arrastra este curso un evidente déficit que brinda otra razón de peso para
creer en la remontada esta noche. Se trata de su
miedo escénico en los grandes estadios de Primera división, en los que ha sido superado con claridad en la presente temporada, saldando las visitas más exigentes con cero puntos. De este modo, los pericos cayeron sin demasiada oposición ante los cuatro primeros de la clasificación y también en otro de los feudos más emblemáticos de España: San Mamés.
Derrotas de las que se extrae un
dato muy positivo de cara a los intereses nervionenses, pues cualquiera de los marcadores de dichos encuentros le valdrían al Sevilla, cuanto menos, para forzar la prórroga, con una desventaja mínima de dos goles y una máxima de cuatro.
Así, en su primer desplazamiento liguero de esta índole, los espanyolistas perdieron por 3-1, tanteo con el que los nervionenses igualarían la eliminatoria. No le fue mejor a los catalanes en el viaje al
Vicente Calderón para enfrentarse contra el
Atlético de Madrid, cayendo precisamente por el 2-0 que necesitan los blanquirrojos en primera instancia para obtener el pase a las semifinales de la Copa del Rey.
Luego les tocó peregrinar a la
Catedral del fútbol, contra un
Athletic en horas bajas, y se repitió la historia de
Valencia, con otro 3-1 en contra. Resultados que no vaticinaban nada positivo para el Espanyol en sus visitas al
Camp Nou y al
Santiago Bernabéu, en los que se cumplió lo esperado con derrotas abultadas. No en vano, el derbi barcelonés en el feudo azulgrana se saldó con una manita de los locales (5-1), mientras que el enfrentamiento en Chamartín concluyó con un 3-0 a favor de los de Ancelotti. En ninguno de todos estos encuentros los pericos estuvieron cerca de regresar a casa con los tres puntos, reflejo de su
debilidad a domicilio y en escenarios de enjundia como el que pisará esta noche. Porque el
Ramón Sánchez Pizjuán es otro de los estadios de postín del fútbol patrio y un auténtico fortín, hasta el punto de que el
Sevilla se erige en el único equipo que todavía no ha perdido como local en esta campaña.
Además, Nervión presentará hoy un
ambiente espectacular y una atmósfera intimidatoria que disparará el
miedo escénico del Espanyol.