Ya lo hemos dicho en la edición en papel de hoy, pero su musicalidad es tan especial que merece tener presencia en nuestra web. Hipnótica. Plena de connotaciones que elevan a los que clubes a un paraíso de sensaciones, por lo que transmite, por lo que significa, por recordarles el camino recorrido para estar entre los elegidos. Sus acordes resuenan antes de cada partido de Champions y genera una atmósfera única, a la altura de la elite europea.
Una partitura evocadora que la UEFA le encargó en 1992 al músico Tony Britten y que compuso a partir de la obra de Händel llamada ´Zadok the Priest´, de la serie de los cuatro ´Coronation Anthems´ (Himnos de Coronación). La letra de esta adaptación está escrita en los tres idiomas oficiales de la UEFA (inglés, francés y alemán) y fue interpretada por la Royal Philharmonic Orchestra y el coro de la Academy of St. Martin in the Fields. Reconocido oficialmente como ´Champions League´, la pieza dura tres minutos y escuchar su estribillo en los minutos previos a que el balón ruede es motivo de gran orgullo para los privilegiados.