El
Sevilla cayó en el
Juventus Stadium más por deméritos propios que por méritos del rival. El conjunto de Emery volvió a mostrar una imagen gris y apática ante una
Juventus que tampoco andaba por su mejor momento pero que sí puso más ganas e intensidad. La primera premisa del fútbol es creer que puedes vencer a tu rival, sea el que sea, pero el Sevilla no lo hizo, y lo demostró esta noche. Y así, imposible...
El comienzo de la
Juventus fue demencial, con mucho ritmo y continuas llegadas a la portería nervionense. El estadio apretaba y el peligro llegaba por ambas bandas. El dibujo de
Allegri, con tres centrales y dos carrileros en las figuras de
Evra y
Guardado, creó un continuo peligro sobre el área de
Sergio Rico.
Sobre todo el colombiano, que perforó una y otra vez por la derecha, poniendo centros unas veces y buscando portería en otras. La
Juventus fue dueña y señora del esférico, mientras el
Sevilla se limitaba a defender las acometidas de la 'Vecchia Signora', eso sí, correctamente, con
Kolo y
Andreolli muy atentos en los balones colgados.
A la media hora de juego el
Sevilla empezó a tener mayor protagonismo, quizás porque la
Juventus bajó en intensidad aunque mantuvo siempre la presión, circunstancia que obligada al Sevilla a intentar un juego directo que no surtía efecto.
Reyes se metió por dentro para intentar canalizar el juego, con
Konoplyanka en banda derecha y buscando hacer daño pero nada funcionaba. Sin embargo, cuando parecía que había pasado el peligro local, en el minuto 41, un centro de
Barzagli al segundo palo lo cabeceaba a la perfección
Morata, ganando la partida a
Andreolli y
Krychowiak, para batir a
Sergio Rico. Fue la única ocasión en que el central italiano se vio superado por alto y acabó en gol, quizás un inesperado castigo pero no menos justo ante el empuje rival.
El Sevilla aguantó hasta casi el descanso, de haber llegado a la caseta con 0-0 en el partido habría sido muy distinto. Antes del paso por vestuarios,
Konoplyanka hizo trabajar a
Buffon con un disparo desde la frontal raso pero centrado, el único a puerta de todo el partido.
En la segunda parte el sino del partido no cambiaría. La
Juventus siguió teniendo el balón y el
Sevilla no presionó ni mordió como para poner en apuros su posesión.
No tuvo ninguna ocasión reseñable el conjunto de
Emery en el segundo acto, aunque tampoco la Juventus excepto una de
Dybala que acertó a sacar con el pie
Sergio Rico. El técnico sevillista dio entrada a Immobile e Iborra pero esta vez los cambios tampoco surtieron efecto. También jugó
Juan Muñoz, pero qué más da quien juegue si la actitud es la misma...
La 'Juve' parecía tener bien amarrado el partido y así lo certificó en el minuto 87 cuando Zaza se beneficiaba de un rebote y se plantaba ante
Sergio Rico al que batía por bajo.
Mal encuentro del
Sevilla, que perdió una buena oportunidad de haber sacado algo positivo y una gran inyección de moral. Ahora llega el
Barcelona en
Liga, no hay tiempo para lamentos, y ya es hora de la reacción definitiva.
- Ficha técnica:
Juventus: Buffon, Barzagli, Bonucci, Chiellini, Cuadrado, Hernanes, Khedira (Alex Sandro 76'), Pogba, Evra, Morata (Zaza 80') y Dybala.
Sevilla F.C.: Sergio Rico, Coke, Andreolli, Kolo, Trémoulinas; Krychowiak, N'Zonzi (Iborra 66'); Reyes (Juan Muñoz 79'), Krohn-Dehli, Konoplyanka y Gameiro (Immobile 66').
Goles: 1-0 (41') Morata;
2-0 (87') Zaza.
Árbitro: Jonas Eriksson (Suecia). Amonestó al sevillista Coke.
Incidencias: Partido de la segunda jornada de la fase de grupos de la Champions League disputado en el Juventus Stadium.