Trabajado y paciente triunfo del
Sevilla en el
Ramón Sánchez Pizjuán ante Las Palmas, que vendió cara su derrota demostrando una defensa compacta y fuerte, sin dejas apenas espacios hasta que Vitolo los encontró. La cuarta plaza sigue lejos, a ocho puntos, pero este equipo no tira la toalla, queda lo mejor de la temporada.
El
Sevilla salió con buen ritmo, con varios cambios en el once pero con la intensidad necesaria para llevar peligro a la portería del exsevillista
Javi Varas.
Banega tuvo ocasión de disparar a los 8 minutos dentro del área pero dudó y acabó perdiendo el ventaja, poco después, era
Reyes el que probaba al de Pino Montano que respondía con una gran estirada a la volea del sevillista.
Mariano y
Trémoulinas, profundos como siempre, aunque el que no llegó a estar fino en la primera mitad fue
Banega, el centrocampista argentino anduvo renqueante por una fea entrada en la rodilla y el juego del Sevilla se resintió. Mientras tanto, los de
Setién seguían con su serio planteamiento y llegando con cierto peligro a la portería de
Sergio Rico aunque sin llegar a exigir al meta de Montequinto.
Con el paso de los minutos el equipo de
Emery se fue desinflando, lo que aprovechó Las Palmas para venirse arriba, y a punto estuvo de costarle caro a los blanquirrojos si no llega a ser porque la madera estuvo de su lado en el disparo de
Jonathan Viera. El canario se sacó un colocado chut desde la frontal que repelió el travesaño a dos minutos para el descanso.
Gameiro y
Konoplyanka se buscaron continuamente pero sin llegar a romper la defensa amarilla.
La grada pedía más intensidad, pues veía que el conjunto de Setién les estaba comiendo la tostada. Y fue tras el paso por vestuarios cuando el
Sevilla puso una marcha más al juego.
Reyes y
Konoplyanka lo intentaron sin cesar, pero no encontraban los pocos espacios que dejaba la zaga amarilla.
El conjunto de Setién se mostró muy solidario en defensa y concediendo poco al rival, por lo que el Sevilla tuvo que tirar de pausa y paciencia para buscar el tanto que abriera la lata.
Pero antes de que fuera demasiado tarde,
Unai Emery movió ficha dando entrada a
Vitolo por Reyes primero, y a
Krohn-Dehli por
Konoplyanka después, dos cambios, que a la postre resultaría vitales para el triunfo.
Con el canario sobre el césped ante sus ex, ya se vio un cambio en el juego. De las botas del canario nació el primera tanto, cuando estando rodeado por cinco rivales en el pico del área vio las medias negras de
Banega entre tantas medias amarillas, el argentino se hizo el hueco y se sacó un zurdazo a la escuadra que acabó entrando tras tocar en el poste. El argentino, que no estaba teniendo su mejor partido, lo resolvió con esa clase que tiene.
Con el 1-0 todo el trabajo de
Las Palmas en los 70 minutos anteriores se fue al traste. Y en esos momentos de dudas de los amarillos, el
Sevilla aprovechó para matar el encuentro.
Krohn-Dehli, uno de los cambios, espero la incorporación de
Vitolo, otro de los cambios, para que el canario apurara línea de fondo y pusiera el balón manso para que
Gameiro hiciera el segundo a puerta vacía.
Cinco minutos bastaron al
Sevilla para derribar la muralla que habría puesto
Setién y que tan buen resultado le estaba dando hasta entonces. Con el 2-0, entró
Juan Muñoz por un ovacionado Gameiro, el utrerano tuvo un par de ellas pero los nervios quizás, no le dejaron pensar.
El
Sevilla sacó adelante un partido que a falta de 20 minutos estaba bastante complicado. Supo madurar el encuentro, tener paciencia, reflejo también de este Sevilla maduro que no tiene nada que ver con el del inicio de temporada. Tres puntos más, la
Champions sigue lejos, pero los nervioenenses no se rinden.
- Ficha técnica:Sevilla F.C.: Sergio Rico, Mariano, Rami, Kolo, Trémoulinas; Cristóforo, N'Zonzi; Banega, Reyes (Vitolo 57'), Konoplyanka (Krohn-Dehli 66') y Gameiro (Juan Muñoz 79').
Las Palmas: Varas, David García (Nili 79'), Aythami, Bigas, Garrido; Roque Mesa (Hernán 72'), Wakaso; El Zhar, Tana, Viera y Willian José (Araujo 83').
Goles: 1-0 (69') Banega;
2-0 (75') Gameiro.
Árbitro: Prieto Iglesias (c. navarro). Amonestó a Kolo por parte del Sevilla; mostró cartulina amarilla a Garrido, Willian José y Wakaso por parte de Las Palmas.
Incidencias: Estadio Ramón Sánchez Pizjuán. 34.448 espectadores.