El sevillista aún no ha terminado de pasar la dulce resaca del jueves de
Feria. Tres días después, cierra los ojos y aún puede recrear el éxtasis de todo el
Sánchez Pizjuán al ver como el penalti de un cojo
Gameiro quitaba las telarañas de la escuadra. Por tercer curso seguido se mete en semifinales -contra el
Shakhtar Donetsk esta vez- y el sueño de la Quinta está ya a sólo dos encuentros. Mucha alegría, además, regada por un buen fino y cantada al son de unas sevillanas con el Real de Los Remedios como escenario.
Y, lo mejor, esta situación tan privilegiada no es nada inusual. El aficionado joven puede creer que ser sevillista consiste en esto: en celebrar los
éxitos europeos y el hecho de ser
finalista de Copa. No obstante, en estos días de lógicas distracciones, es labor de padres y abuelos recordar que ser sevillista es olvidarse de la final de Copa hasta el 22 de mayo y de las semifinales de
Europa League hasta el 28 de abril. Aparcar esta novedosa y placentera ilusión por ganar títulos y llenar el campo hoy.
Aunque la
Liga ya no sea la prioridad del club. A pesar de que la séptima plaza (Europa) esté casi asegurada con un colchón de siete puntos sobre el
Málaga. De que se celebre a la hora de la siesta en pleno fin de semana de
Feria y por mucho que las previsiones aconsejen ir cargados de chubasqueros o paraguas. Ser del
Sevilla es estar hoy al lado de su equipo. Porque para luchar por firmar un doblete es necesario crear una dinámica positiva. Y qué hay más positivo que romper con esas tres derrotas seguidas en Liga, que tantas dudas crearon antes de recibir al
Athletic, y vencer esta tarde en casa ante el
Deportivo. Sí, el Deportivo. Ése equipo del que casi nadie habla en Nervión y que ha viajado a por los tres puntos para cerrar de una vez su permanencia.
Víctor, técnico de los coruñeses, buscará hacer sangre a balón parado y ha ensayado con Luisinho en banda izquierda para que su 1-4-4-2 en ataque pase a ser en defensa un 1-5-4-1,
Navarro de central, y dejar sin espacios a un Sevilla con muchas novedades.
Y es que no sólo hay que pedir un plus de entrega a la afición.
Si el
Sevilla este año ha llegado más justo de fuerzas al tramo decisivo es porque Emery no ha tenido tanto fondo de armario como en los dos últimos años. O, mejor dicho, porque a lo largo de la temporada los titulares han sido cada vez más titulares y los suplentes cada día más suplentes. En mano de ellos está cambiar esto.
Especialmente, en las manos de los más señalados:
Llorente y
Konoplyanka, quienes junto a
Reyes y
Banega deben liderar hoy a un Sevilla con muchas bajas y con hombres que necesitan respirar. Uno de ellos es Rami, que lo ha jugado todo en este 2016. La dupla
Carriço-Kolo sería una opción para darle una tregua al líder de la zaga. Otra duda es
N'Zonzi o
Iborra. El resto del once parece cantado. A estos toca alentar hoy. Porque en eso consiste el sevillismo.
- Alineaciones probables:
Sevilla F.C.: Sergio Rico; Coke, Carriço, Kolodziejczak, Escudero; Cristóforo, N'Zonzi; Reyes, Banega, Konoplyanka; y Llorente.
Deportivo: Manu; Juanfran, Lopo, Sidnei, Navarro; Pedro Mosquera, Celso Borges; Fayçal Fajr, Luis Alberto, Luisinho; y Lucas Pérez.
Árbitro: Santiago Jaime Latre (C. Aragonés).
Estadio: Ramón Sánchez Pizjuán, 16:00 horas (C+L/AF).