La lesión del madrileño David Soria el pasado mes de agosto propició la llegada del italiano Salvatore Sirigu para reforzar la portería blanquirroja. Un arquero experimentado que arribó a Nervión bajo la promesa de acumular aquellos minutos que se le privaban en el PSG y que, sin embargo, Sergio Rico le ha arrebatado, evidenciando el de Montequinto un excelente momento de forma que ha dificultado las rotaciones de Sampaoli; a pesar de que hayan existido, ofreciéndole a Sirigu, cedido hasta final de temporada, los partidos de Liga frente a Eibar y Athletic Club, en el que fue sancionado con dos encuentros por propinarle un codazo a Aduriz sin estar el balón en juego. Condena que comenzó a cumplir frente al Alavés y que completará el próximo sábado en Butarque.
Una ausencia en la convocatoria, la de Sirigu, que a priori será completada por un David Soria ya recuperado que, por otro lado, no podrá participar el martes en Croacia, al no estar inscrito en Champions. Unas circunstancias que, por tanto, jugarán a favor del argentino Jorge Sampaoli, quien no tendrá que afrontar el problema de la portería hasta la semana siguiente, cuando los de Nervión recibirán al Atlético de Madrid en el Sánchez Pizjuán el domingo 23 de octubre (16:15 horas); momento en el que el de Casilda tendrá que dejar a uno de sus arqueros en la grada.