Una de las grandes incertidumbres que existían el pasado verano con la llegada de
Jorge Sampaoli al banquillo del
Sánchez Pizjuán, más allá de la propia de cómo funcionaría el técnico argentino, residía en la figura de
Juanma Lillo, segundo entrenador blanquirrojo y mano derecha del técnico casildense; papel que hasta hace muy poco jugaba
Sebastián Beccacece, quien se separó del 'Zurdo' para convertirse en técnico de la 'U', equipo que recientemente abandonó.
Un profesional del balón, el de Tolosa, que se incorporó al cuerpo técnico del argentino durante los últimos meses de
Sampaoli como seleccionador de
Chile, donde en teoría jugó un papel de nexo con las divisiones inferiores aunque en la práctica trabajó codo con codo en la mejora del juego con balón; tarea de la que principalmente se ocupa también ahora como sevillista.
Es decir, una relación relativamente corta que, fundamentalmente, se basaba en la amistad de
Lillo con
Guardiola, quien lo considera su mentor y a quien
Jorge Sampaoli admira como entrenador. Una forma de contar con Pep dentro de su cuerpo técnico sin estar el catalán en él que,
lógicamente, despertó cierto recelo entre el sevillismo cuando se anunció la incorporación de Sampaoli como sustituto de
Emery en Nervión. Todo eso, sumado a la melódica a la vez que vacía verborrea de Lillo y la carrera de éste como entrenador, ponía en duda la figura de
Juanma Lillo en Nervión, donde el de Tolosa ha optado por no levantar la boca en exceso y dedicarse a trabajar en silencio, algo que, al parecer, ha calado hondo, tal y como han declarado recientemente varios futbolistas del primer equipo.
"Tengo a
Sampaoli, que es una mezcla de Bielsa y Guardiola. Su adjunto,
Juanma Lillo, fue el mentor de Guardiola, así que la asociación de los dos en
Sevilla funciona muy bien. Puedo progresar con ellos", declaró
Nasri en Francia; una opinión que comparte
Escudero, quien entiende que su convocatoria por Lopetegui se debe en parte al estilo del 'Sampaolillo', donde el de Tolosa lo hace en silencio, pero trabaja. Y mucho.