Sevilla F.C.-Valencia: Matemáticas para seguir de fiesta

Cuesta, quizás, hallar un nexo para dos términos que pertenecen a campos semánticos distintos y a los que, por lo general, se les considera prácticamente incompatibles, pero en este caso las matemáticas se erigen en una materia indispensable para seguir de fiesta en el Sánchez Pizjuán. Porque las permanentes sensaciones positivas transmitidas por el Sevilla de Sampaoli precisan recuperar el respaldo de los resultados que sostuvieron el proyecto mientras cuajaba la sugerente propuesta estilística del casildense. Los nervionenses mantuvieron al alza el grado de ilusión del sevillismo contra Barça y Juventus por sus formas ante dos grandes a los que llegó a superar en fútbol, mas los puntos volaron, lo que esta noche no puede volver a suceder en una fortaleza en la que, hasta la llegada de Messi, el Sevilla no había realizado ni una sola concesión. Enfrente estará un Valencia sin rumbo. Con problemas de personalidad y la urgencia de resurgir cuanto antes para acercarse a unas expectativas de las que últimamente se encuentra a un abismo.

Prandelli aterrizó como solución después de que Voro suavizara el desaguisado de Ayestarán, pero en su saldo sólo se contempla un triunfo, en su debut, por dos empates y dos derrotas, por lo que visita la 'Bombonera' en una situación delicada y en pleno descontento social. Una tesitura que se refleja en su intención de levantar una muralla delante de Alves, con una línea de cinco en la retaguardia y dos pivotes de corte defensivo. Este planteamiento, aferrado a las salidas a la contra, requerirá paciencia y profundidad en los de Sampaoli, que no dispondrá de dos herramientas fundamentales para percutir sobre el entramado che, ya que Mariano no se ha recuperado a tiempo de su elongación y Nasri continúa parado para poder regresar completamente restablecido; bajas a las que se suma la del tocado Carriço. La ausencia del brasileño condiciona el once y genera la incógnita acerca del dibujo que utilizará el de Casilda, que, sin su carrilero diestro, puede apostar por un 4-2-3-1 con Mercado por la derecha, en la que sería la opción menos experimental. No obstante, la duda de Escudero abre la puerta a la alternativa de jugar con un 3-5-2, con tres centrales y Vitolo como carrilero en la derecha, mientras que en la zurda podría desempeñarse Sarabia (o intercambiarse con el canario) si finalmente el pucelano no estuviera apto. Menos viable se antoja la presencia de Kolo como lateral por la escasa confianza del técnico en la prestancia del galo.

En la media, es posible que forme con un doble pivote con N'Zonzi y Kranevitter de cara a utilizar la magia de Ganso para superar la resistencia che, aunque la presencia del brasileño no está garantizada en un once donde no se descartan dos puntas. Lo único claro es que el Sevilla saltará a la 'Bombonera' fiel a una filosofía en la que sólo cabe el protagonismo y la intención de someter a un Valencia ya de por sí timorato.