Un espejo reluciente para mirarse

Amainado el temporal generado por el adiós de Monchi y avivado por el cantado acuerdo entre la AFA y Sampaoli, episodios que coincidieron a su vez con la peor racha de la temporada sobre el césped, el Sevilla afronta las cinco jornadas que restan con la cuarta plaza casi amarrada, objetivo mínimo exigible, y con la ilusión de recuperar un tercer puesto que hace no mucho parecía asegurado, lo que podría ´venderse´ como un éxito. Ese es el gran reto. El discurso se ha unificado y todos en Nervión reman en la misma dirección, a la caza de un Atlético que mantiene una ventaja de tres puntos y cuenta con el ´average´ particular a su favor.

Con ocho unidades de renta sobre el Villarreal, se quiere mirar arriba. Y qué mejor manera de hacerlo que mirarse en el espejo de la primera vuelta, cuando el ´Amateurismo´ era llevado a los altares y el conjunto nervionense firmaba su mejor racha del curso en Liga ante los mismos rivales que ahora restan. Entonces, después del inesperado tropiezo ante el Granada (2-1), los pupilos del casildense alcanzaron el ecuador después de firmar un pleno de cinco triunfos en el que además desplegaron todo su potencial ofensivo, con hasta 17 tantos a favor: una media de 3,4 por partido.

La racha comenzó en Balaídos ante el Celta, que el próximo jueves visitará el Pizjuán con el recuerdo de un 0-3 que tuvo en Iborra a su único goleador. Luego, los sevillistas darían buena cuenta del Málaga en casa (4-1); volvieron a golear a domicilio a la Real Sociedad (1-4), con ´hat trick´ de Ben Yedder; se vengaron de la eliminación en Copa ante el Madrid (2-1); y cerraron la primera vuelta con un ajustado triunfo ante Osasuna (3-4).

Quince puntos de quince posibles en una serie que, de repetirse, acercaría el sueño de una tercera plaza que sería nervionense si el Atlético también repite lo que hizo en ese mismo tramo: 10 puntos, tras vencer a Las Palmas (1-0), Eibar (0-2) y Betis (1-0) y pinchar a domicilio ante Villarreal (3-0) y Athletic (2-2).