El primer doblete como sevillista de
Franco Vázquez no va a ser tan recordado como merecería el partidazo que el ‘Mudo’ firmó ayer en La Rosaleda. El ítalo-argentino se desquitó de su pobre rendimiento en esta segunda parte del campeonato y tuvo gran presencia en todas las acciones de ataque de los nervionenses.
El ex del Palermo arrancó de falso extremo izquierdo, moviéndose de fuera a dentro, dejando toda la banda para las subidas de
Escudero. Así, se ofreció para tocar en terreno local, se asoció bien con
Correa,
Sarabia y
Ben Yedder y, sin balón, desterró su archiconocida pereza para liderar la presión alta de su equipo.
Por si fuera poco,
marcó dos goles importantes por la factura y por el momento. 99 días después de su último tanto (el 22 de enero en el 2-3 en Pamplona), hizo el 0-1 tras un
bonito caño a Camacho y una galopada para batir a Kameni tras el ‘tuya-mía’ con
Ben Yedder. Luego, abortó la primera remontada malaguista y puso el 2-2 con un gol de pillo, al cazar un mal despeje de
Luis Muñoz. Lástima que no sirviera para puntuar.