La mejoría experimentada por el
Sevilla con
Montella no admite discusión por las evidencias que la respaldan tanto a nivel de sensaciones como de resultados a medida que sus ideas han ido calando en el vestuario nervionense. Con su trabajo, ha dotado de personalidad y un patrón de juego al equipo y le ha devuelto la confianza en el plano colectivo y en el individual, lo que se refleja en su creciente fiabilidad, patente, especialmente, en las competiciones que exigen rendimiento inmediato y no una regularidad.
Porque este nuevo
Sevilla, el del italiano, se ha mostrado prácticamente intratable en todas las eliminatorias, con un saldo muy positivo que lo ha llevado hasta la final de la
Copa y con opciones reales de hacer historia con el pase a cuartos ante un todopoderoso como el
Manchester United.
Así las cosas, el italiano ha dirigido al equipo en un total de siete encuentros en los torneos eliminatorios y todavía no conoce la derrota, con cinco victorias, dos empates y tres cruces superados en la competición copera. Nada más llegar, se impuso al
Cádiz en el
Ramón de Carranza por 0-2, para luego, en plena tormenta tras caer en el derbi, rematar la faena en casa. Lo realmente difícil vino después con el duelo deparado por el bombo contra el
Atlético de Madrid, en el que partía como víctima pero sorprendió con el primer aviso serio de su transformación en ciernes. Se convirtió en el primer equipo español en ganar en el
Wanda Metropolitano y en la vuelta culminó con un autoritario 3-1 en un partido soberbio.
Ya en semifinales no pudo prolongar el ciclo de triunfos pero obtuvo un buen resultado en
Butarque (1-1) que pudo ser mejor y resultó suficiente de cara al segundo asalto, resuelto con 2-0 en el
Ramón Sánchez-Pizjuán.
Esta fiabilidad se enfrentaba el miércoles a una prueba de fuego con la visita del
Manchester en los octavos de final de la
Champions. Test aprobado con nota con una actuación brillante para pasar por encima de los 'Red Devils' en todas las facetas menos en el marcador por mor de la respuesta extraordinaria de
David de Gea, quien evitó que el Sevilla adquiriera ventaja en una eliminatoria que se resolverá en
Old Trafford. Allí, en el 'Teatro de los Sueños',
Montella persigue prorrogar su condición de invicto en este tipo de partidos, lo que significaría la clasificación.
Reacción ligueraHasta hace varias fechas, la solvencia en la Copa no era extrapolable a
LaLiga, a la que Montella no terminaba de conectar a su equipo, con dos derrotas seguidas ante
Betis y
Alavés y un doloroso empate contra el
Getafe tras imponerse en
Cornellá. Sin embargo, esta dinámica también ha cambiado y el despegue liguero toma forma merced a las dos victorias consecutivas contra
Girona y
Las Palmas que el domingo debe refrendar con otro golpe en la mesa ante el
Atlético.