Vivo en tres competiciones,
Champions,
Liga y
Copa del Rey, al
Sevilla de
Montella se le antoja larga la resaca cuando tiene que hacer frente al campeonato regular después de haber disputado la Copa o la Champions.
Tras un partido de escándalo en
Mánchester, donde el
Sevilla consiguió doblegar a su rival y expulsar a
Mourinho de la
Liga de Campeones en el mismísimo ‘
Teatro de los Sueños’, los de
Nervión cayeron ante el
Leganés, un equipo en decimoquinta posición en
LaLiga y que actualmente se encuentra muy lejos de aquel que consiguió eliminar al
Real Madrid de la
Copa con el famoso ‘pepinazo’. Con la pugna por la cuarta posición de la tabla prácticamente perdida y mostrando un brillante rendimiento en
Champions y
Copa,
Butarque sacó lo peor del
Sevilla en un encuentro para olvidar, que sirvió para hacer temblar sus bases clasificatorias y opciones europeas. Lo cierto es que este traspié no sorprendió demasiado en
Nervión, donde han visto desde la llegada de
Montella cómo su equipo ha perdido cinco de los ocho encuentros que ha disputado tras el torneo del K.O. o la
Champions, habiendo empatado uno y ganado sólo dos.
Betis, Alavés, Eibar, Atlético de Madrid y Leganés han sido los equipos encargados de arrebatar los tres puntos al
Sevilla desde que la etapa de
Vincenzo Montella arrancase allá por el mes de enero, una vez resuelta la salida de
Eduardo Berizzo, cuyos números, quizá, eran mejores que las sensaciones del equipo.
El empate ante el
Getafe y las victorias sobre
Espanyol y
Girona han sido el único rédito que el conjunto nervionense ha conseguido sacar tras extenuantes eliminatorias. Mejores son los resultados de su antecesor, quien abandonó la entidad blanquirroja con seis victorias, un empate y tres derrotas. Sin duda, una de las causas de estos varapalos puede deberse al reiterativo uso de los llamados titulares y a un escaso rendimiento de los jugadores de refresco. Una falta de confianza en el fondo de armario que no acaba de contentar a la planta noble de
Nervión, que entiende que el calendario puede hacerse largo.