Un problema extra (comunitario) para Caparrós

Un problema extra (comunitario) para Caparrós
Muriel es uno de los tres extracomunitarios del Sevilla FC. - Carlos Pérez
Carlos PérezCarlos Pérez4 min lectura
Se trata de una profesión tremendamente peliaguda, en la que pocos consiguen perpetuarse en el cargo. El Sevilla, de hecho, no logró encontrar un director deportivo idóneo en el mercado con el que reemplazar a Óscar Arias y terminó confiando su nuevo proyecto a un Joaquín Caparrós al que su ferviente sevillismo le ha llevado a aceptar un puesto para el que, en un principio, no se veía preparado.

Y el utrerano no está dejando de encontrarse con dificultades en un contexto, particular y general, muy complejo. Muchas más de las que pensaba... Tenía claro quién debía ser su entrenador, que no deja de ser una apuesta arriesgada, pero aún no ha conseguido, como él mismo dice, meter a "ninguna rata en la lata". Entre otras cosas, porque la tiene llena y sacar jugadores de la misma es casi más trabajoso que meterlos. 

En estos momentos, el Sevilla tiene el mercado muy limitado por tres motivos principales: el Mundial, en el que hay muchos jugadores y agentes con los que no se puede negociar; la inflación, que está aumentado los precios de todos los futbolistas desde el 'caso Neymar' hasta puntos insospechados; y las plazas de extracomunitarios. A Caparrós le gustan varios extranjeros sin pasaporte, como el central Héctor Moreno, pero les está pidiendo tiempo para poder hacerles un hueco. 

Para ello, no obstante, debe procurarle una salida a Luis Muriel, Paulo Henrique Ganso y Guilherme Arana. Por partes:

El colombiano costó una fortuna (más de 20 millones de euros) y, pese a estar en Rusia 2018, ni mucho menos se está revalorizando. Debutó este jueves, sustituyendo al lesionado James en el minuto 31 del partido ante Senegal, y su participación fue gris. Por fortuna, Colombia se ha metido en octavos y, con el exmadridista fuera de juego, podría tener más ocasiones para colocarse en el escaparate. 

Lo de Ganso, mientras, está muy enquistado. Desde su entorno deslizan a ESTADIO que tiene "300 propuestas", pero que el problema es que todos los interesados "lo quieren libre" y el Sevilla, que invirtió su traspaso 10,5 millones de euros, se niega. Pese a que se asegura en Brasil que el club le ha comunicado que ni siquiera empezará la temporada, no es así. Si no le dejan salir, seguirá como gran parte de la última temporada: en la grada y cobrando, no siendo poco lo que percibe... Casi dos millones netos. 

La dificultad que está encontrando Caparrós para sacar a ambos, podría repercutir en un Guilherme Arana que enfadó mucho, por su estado físico (acabó la temporada con tres kilos de más), al ahora Director de Fútbol, quien se mantiene expectante por ver cómo regresa el lateral zurdo de sus vacaciones en Brasil. El ex del Corinthians, no obstante, sí se está cuidando esta vez, pisando el gimnasio cada día y jugando partidillos. 

El caso es que Caparrós quiere liberar, como mínimo, una plaza de extracomunitario para poder fichar y, en estos momentos, la salida más factible es la de un Arana al que podría ceder el Sevilla a otro club español, para que se adapte a LaLiga teniendo los minutos que le negaría Escudero en Nervión. 

Sea como sea, a día de hoy el de los extracomunitarios es un problema importante más de los muchos que se está encontrando Caparrós en un puesto nuevo para él y ya de por sí afanoso.
Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram