El precedente que desmonta la teoría de Rubiales

Tras la decisión de forma unánime por parte del consejo de la RFEF para que la Supercopa de España se juegue en Tánger, uno de los motivos de peso que ha utilizado el presidente, Luis Rubiales, a la hora de referirse a esa medida puntual ha sido la acogida al convenio colectivo por parte del máximo órgano del fútbol español, por el que no se podría disputar el encuentro el día 5 de agosto, al haber jugadores de vacaciones una vez finalizado el Mundial.

El precedente que desmonta esta justificación se remonta a 2010, año de Mundial. Mismos protagonistas. De nuevo Barcelona y Sevilla se veían las caras en la Supercopa, llegando los azulgranas a la cita con numerosas bajas que afectaron al 3-1 sevillista de la ida. Aunque más tarde, en el segundo partido, los culés remontarían con un 4-1 en el Camp Nou. En ese evento no se tuvo en cuenta esta tesitura en la que Luis Rubiales también tuvo que ver, siendo por entonces presidente de la AFE y no poniendo reparos en esas fechas dadas.

Del mismo modo, según informa el portal especializado en la jurisdicción del deporte Iusport, el punto 2 del artículo 11 también pone de manifiesto la falta de fondo en el alegato del nacido en Canarias, por el que en el convenio sólo se impide programar encuentros en Navidades, sin atender a la imposibilidad de jugar envites en el mes de agosto. Asimismo tampoco se mencionan las vacaciones de los efectivos en año de cita mundialista, sin ser esto motivo para no jugarse.