Puede que
Marcao sea sólo uno más de los centrales con los que
Monchi está avanzando operaciones, pero parece claro que no es uno nuevo. Ya desde antes de que el director deportivo del
Sevilla FC regresara al club de Nervión,
la secretaría técnica sevillista preparaba informes del entonces recién llegado al fútbol turco.
Marcao acababa de aterrizar en el
Galatasaray -enero 2019- tras un buen año en el fútbol portugués -Chaves- y una cesión previa al Rio Ave luso, que le sirvió de trampolín en Europa tras formarse en el Atlético Paranaense. Era alto y fuerte, y tenía buenas cualidades con el balón. Sólo le faltaba experiencia antes de dar el salto a un equipo de una de las cinco grandes ligas. Y en tres años en un conjunto puntero, como el Galatasaray, la ha adquirido.
Con dos años de contrato por delante, el zaguero de Londrina está listo para emprender el vuelo a sus 26 años recién cumplidos. Así lo entiende su equipo, que sabe que es de los jugadores por los que puede sacar más dinero este verano, y que hay varios equipos que se han interesado por él.
Entre ellos,
el Sevilla es que principal aspirante, según la prensa turca, que ya habla de
un primer intento de 10 millones de euros. Según estas mismas fuentes, el Galatasaray, a su vez, ha empezado pidiendo 20 millones. Aunque desde allí dan por hecho que
saldrá por unos 15 kilos, uno más que su actual valor de mercado (14 según transfermarkt).
Lo que parece claro es que todo va para largo. El equipo turco ha elegido nuevo presidente y directiva hace unos días y lo primero que hizo ayer fue despedir a su entrenador, el español Doménec Torrent, ya que parecía haber unanimidad en la cúpula del club y la afición en que el técnico catalán no encajaba en el equipo. Elegir al nuevo técnico y cerrar el plantel deben ser los siguientes pasos. Y ahí entraría la salida de Marcao y otra que está más adelantada, la de Semih Kaya.
Torino y Zenit, rivales por Marcao
Aunque el Sevilla aparece como el principal interesado, hay dos clubes que también estarían en la pelea, aunque no son de su nivel. Uno es el
Torino italiano, que este año no jugará competición europea tras acabar décimo en la Serie A. Y el otro es el
Zenit de San Petersburgo, campeón de la Liga rusa, que tampoco participará en Europa por la sanción impuesta por la UEFA y que, pese a pagar bien, tiene ese hándicap que le hace estar en desventaja con el resto de equipos europeos.
El brasileño, que es el líder de la defensa del Galatasaray, disputó 38 partidos la pasada temporada, casi 3.500 minutos, y marcó 1 gol. Fue precisamente ese tanto el que le dio a conocer en España, pues fue al
Barça en octavos de final de la Europa League. Un gol que, provisionalmente, eliminaba a los blaugranas, que luego remontarían.