El Sevilla llegó a Getafe con ocho bajas y se volvió con tres más

El Sevilla viajó a Getafe con ocho bajas (Carriço, Vitolo y Aleix Vidal, por sanción, y Reyes, Trémoulinas, Beto, Gameiro y Cristóforo, por lesión) y se volvió con tres más de cara al partido del próximo fin de semana ante el Córdoba: las de Diogo Figueiras, que estaba apercibido y fue amonestado, y las de M'Bia e Iago Aspas, que tuvieron que ser sustituidos por molestias.

El camerunés apenas estuvo 11 minutos sobre el campo antes de sentir un pinchazo. "Tiene molestias en la parte larga del bíceps femoral, en una zona cercana a la rodilla. Mañana (por hoy) se le harán pruebas para ver el alcance exacto", explicó en la radio oficial Juan José Jiménez, el jefe de los servicios médicos.

Por su parte, el gallego tuvo que ser atendido en la banda y finalmente también tuvo que marcharse por "unas molestias entre el pectineo y el adductor medio de su pierna derecha". "Le dolía menos y podía andar. Puede que se trate sólo de una contractura o una elongación, pero hay que esperar a las pruebas para descartar que exista una rotura fibrilar", explicó el galeno.

Sin el ex del Celta y Liverpool y con Gameiro en el dique seco, Emery no quiso arriesgarse con Carlos Bacca y quedarse sin delanteros. El colombiano, que también estaba apercibido de sanción, fue sustituido antes de que viese su quinta amarilla.