Dice Haro que "el Betis debe estar
por encima del Sevilla como entidad", por todo lo que representa. Que es lo que piensa y que si no lo pensara, "sería un mal bético". Y exclusivamente por eso debe ser respetada su opinión, porque es la de un bético, y no la de un presidente. O al menos eso espero, ya que, por mucho que luego intente reiterar que "realmente no" se fija en el Sevilla,
el Betis debe estar por encima de su presidente, se llame Haro, Catalán o quien sea. Que
un club histórico, con más de 50.000 socios y con una masa social que apabulla a cualquier rival
no debe caer en comparaciones estériles de tiempos pretéritos. Pues ser presidente del Betis, creo, debe ser mucho más que ser empresario, algo de lo que presume ("nuestras empresas van bien"), o mirarse en el espejo de un Atlético al que años atrás veía "muy parecido", a pesar de que los colchoneros sumen diez ligas, diez Copas del Rey, una Intercontinental, dos UEFAS... Y la mayoría de ellas ya estuvieran antes de que arribara el Cholo a su banquillo.
Es decir,
mayor sensatez, pues se deduce que se conforma con ser penúltimo como entidad si fuera el último un Sevilla que, en el ranking UEFA, es sexto.
El Betis, seguro, es más que eso.