El central verdiblanco
Jordi Figueras ha sido el encargado de atender a los medios de comunicación en rueda de prensa, que ha tenido lugar tras el entrenamiento matutino a puerta cerrada en la
Ciudad Deportiva Luis del Sol.
El jugador ha transmitido el pesar del vestuario por la dramática situación del equipo pero confía en regalar a la afición una última victoria en casa, ante el
Valladolid, donde esperan acabar la temporada en el
Villamarín con una victoria. "Como venimos haciéndolo durante toda la temporada; analizando al rival, mirando nuestros defectos y nuestras virtudes porque lo que queremos es acabar de la mejor manera posible y eso es ganando el último partido en casa y más después de un año tan malo", afirma el ilerdense.
Jordi no podrá disputar este encuentro ya intranscente al ver su quinta amarilla contra la
UD Almería, por lo que deberá de cumplir partido de sanción. El futbolista explicó además la jugada de la tarjeta. "Me sacó una amarilla cuando ya había pasado todo. Fui a separar y el árbitro se confundió y me sacó tarjeta así que no podré estar".
Finalmente, el defensa verdiblanco lamentó el no poder ir este año al
Real de la Feria. "La verdad que me da pena no poder ir porque amigos que han venido me han hablado muy bien, la ciudad se pone muy bonita. Me hacía ilusión ir pero este año no hay nada que celebrar. Esperemos que otro año se pueda".