Los últimos precedentes apuntan que nunca un míster ascendió a la primera

La maldición del técnico ascensor, el reto de Julio Velázquez

Ningún entrenador sobrevivió al banquillo en el primer intento de regresar a Primera tras un descenso, siempre fue necesario un relevo en el puesto para retornar a la máxima categoría.

La maldición del técnico ascensor, el reto de Julio Velázquez
Velázquez tiene ante sí el difícil reto de ´sobrevivir´ después de un descenso. - J.M. Cano
José Manuel CanoJosé Manuel Cano3 min lectura
El año I después de un descenso nunca fue fácil. Ya se sabe que a perro flaco todos son pulgas y huelga señalar que la responsabilidad de coger a un equipo justo después de haber bajado al infierno es una papeleta siempre complicada. Además, en el caso del Betis, los precedentes no son nada halagüeños en este sentido pues ningún entrenador sobrevivió al banquillo en el primer intento de regresar a Primera tras un descenso.


Así, en la historia verdiblanca se contabilizan once descensos a Segunda división, once ´annus horribilis´ de infausto recuerdo (1940, 1943, 1966, 1968, 1973, 1978, 1989, 1991, 2000, 2009 y 2014) cuyo legado siempre tuvo como denominador común una víctima: el entrenador que intentó llevar al equipo nuevamente a Primera inmediatamente después de haber descendido.


Echando la vista al pasado reciente heliopolitano, no hace falta viajar muy atrás en el tiempo para reconocer a las primeras víctimas de esta maldición.


En la temporada 78/79, fue José Luis García Traid quien asumió el mando de la nave. Empezó fenomenal, pero el equipo se le fue desmoronando con el paso de las jornadas hasta que una dura derrota en La Rosaleda (3-0) fue su sentencia final un 7 de abril de 1979. Tuvo que ser León Lasa, que dirigió al equipo en los últimos diez partidos del curso, quien ascendió a Primera.


En la 89/90, Juan Corbacho aguantó en el banquillo hasta casi el final de la temporada, pero tampoco fue él quien firmó el ascenso. Su sustituto, Julio Cardeñosa, fue quien se llevó la gloria tras dirigir al equipo tan sólo en las últimas seis jornadas.


Después llegó la dura travesía por el desierto en la década de los 90. Hasta seis inquilinos pasaron por el banquillo de Heliópolis para lograr retornar a Primera en Burgos en el año 2000. Jarabinsky, Felipe Mesones, Jorge D´ Alessandro, José Ramón Esnaola, Sergio Kresic y Lorenzo Serra Ferrer.


El pasado más reciente
Una historia similar ocurrió en 2001, justo después del antepenúltimo descenso. Fernando Vázquez tampoco logró terminar el curso pues Lopera decidió prescindir de sus servicios a falta de 13 jornadas para el final. Fue Luis del Sol quien se hizo cargo del equipo entonces.


Y en el último precedente, en 2009, no hace falta tener mucha memoria para recordar que Antonio Tapia sólo estuvo media temporada en el banco. Tras él, llegaron Víctor Fernández y después Pepe Mel, el último entrenador que ascendió al Betis.


Ahora le toca a Velázquez, que tendrá la oportunidad de romper una maldición que se remonta a tiempos inmemoriales.
Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram