El lateral derecho, un flanco sin dueño claro en el Betis

Con el aval de Julio Velázquez, su técnico en el Murcia durante la pasada campaña, el primer fichaje bético para la 14/15, Francisco José Molinero Calderón, llega a Heliópolis para reforzar un puesto ´maldito´ en las últimas temporadas, puesto que ninguno de sus inquilinos ha logrado asentarse plenamente en esa posición por diversas circunstancias. Hasta siete futbolistas han pasado por el lateral derecho verdiblanco en las cuatro últimas campañas, en una revolución iniciada antes del último ascenso. En aquel verano de 2010, Damiá y Nélson hacían las maletas para dejar paso al canterano Isidoro y al portugués Miguel Lopes, pero aunque ambos contribuyeron al objetivo del retorno a la máxima categoría, no lograron hacerse dueños del flanco diestro de la zaga más allá de ese exitoso ejercicio.


En el caso del portugués, que estuvo cedido por el Oporto, convenció, pero los rectores béticos intentaron retenerlo en vano debido a la delicada situación económica del club, mientras que en el caso del canterano, las muchas oportunidades de las que gozó en Segunda fueron menguando de forma importante al curso siguiente en Primera, por lo que acabó marchándose al Numancia. Se repescó entonces al caboverdiano Nélson, tras su cesión en Osasuna, y se incorporó sin coste alguno a Chica procedente del Espanyol, arrancando la temporada 11/12 con tres laterales diestros, junto al mencionado Isidoro. Así, a lo largo del curso, Mel repartió titularidades entre Chica y Nélson, siendo el primero quien más partidos ha disputado en todo este tiempo en esta inestable demarcación, ya que el internacional portugués acabaría marchándose por la puerta de atrás a mediados de la 12/13, con destino al Palermo, tras una lamentable y recordada actuación en el derbi.


En esa temporada, la del regreso del conjunto de las trece barras a Europa, la planificación verdiblanca volvió a contar con tres jugadores específicos para esta posición, puesto que también aterrizó en verano el canario Ángel, lastrado por unos problemas físicos que tan sólo le permitieron disputar once encuentros, poniendo fin a su etapa bético sólo un año después. Ya el pasado curso, la costumbre de tener en nómina a tres laterales derechos continuó en Heliópolis, aunque la aventura del alemán Steinhofer tan sólo duró unos meses. Además, el rendimiento de Chica bajó muchos enteros, de ahí que no cuente para el nuevo proyecto, y Juanfran, pese a unas cualidades de las que el club sacará tajada con un traspaso que podría rondar el millón de euros, evidenció unas lagunas defensivas que unido a todo lo anterior se ha traducido en la llegada de Molinero y la más que segura de otro nuevo lateral.