El análisis del Real Madrid-Betis

Una valentía competitiva

Una valentía competitiva
- Fernando Mateos
Fernando MateosFernando Mateos 2 min lectura
En el escenario más insospechado, Víctor Sánchez del Amo volvió a poner en liza dos delanteros, algo de lo que prescindió en las tres últimas citas, y colocó por detrás de ellos un trivote con cualidades eminentemente asociativas. Ningún perro de presa en una clara declaración de intenciones. El Betis no iba a renunciar a morder, aunque en el primer cuarto de hora no olió el balón ante un Madrid espoleado por la derrota del Barça.

La zaga de cinco verdiblanca se metía demasiado atrás, empujada por un conjunto blanco que alcanzaba la línea de tres cuartos con suma facilidad ante la falta de músculo en la medular bética, por lo que había que recorrer muchos metros para acercarse al portal merengue. Pero supieron hacerlo los de Víctor. Cada balón que caía en las botas de Ceballos o Rubén Pardo activaba automáticamente la carrera de los laterales y los puntas. Y así comenzaron los de Heliópolis a inquietar a Keylor, al que Mateu Lahoz perdonó una clara expulsión -de vergüenza- y que acto seguido hizo ‘justicia’ al comerse el 0-1.

El tanto sentó bien a un cuadro verdiblanco que, con oficio, tapaba espacios y se defendía bien... hasta que sus centrales dejaron solo en boca de gol a Cristiano al filo del descanso. Un regalo que, sin embargo, ni mucho menos hundió al Betis. Es más, mejoró en el segundo acto, presionando más arriba para impedir la salida de balón madridista y robar cerca del área rival para rondar el segundo. Un plan que se mantuvo pese a sacrificar a Rubén Castro para dar entrada a Petros y que el Madrid sólo pudo desmontar gracias a su salvador de cada día, aunque hasta el final, y con diez, buscaron los verdiblancos el empate.

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