A buenas horas... si la dicha es buena

A buenas horas... si la dicha es buena
La imagen, del entrenamiento matinal del Betis ayer, demuestra que las victorias seguidas ante el Eibar (2-0) y el Celta (0-1) han rebajado la tensión y han dado pie a aspirar a terminar la Liga con un sonrisa en el rostro. - A. Torvisco
Aitor TorviscoAitor Torvisco 4 min lectura
Algunos béticos dirán eso de 'A buenas horas mangas verdes' y otros replicarán con un 'Nunca es tarde si la dicha es buena'. Ambos tendrán una importante cuota de razón, pero a buen seguro coincidirán en celebrar que el Betis por fin haya sido capaz de encadenar dos triunfos seguidos y, además, que lo haya hecho con una mejora notable de su juego y también de su seguridad defensiva; dos aspectos que invitan a pensar en que la plantilla verdiblanca tiene en su mano conseguir el premio menor de ponerle un buen broche a otro mal año.

Hacía ya mucho tiempo que en la Ciudad Deportiva Luis del Sol no se veían caras tan alegres como las que Víctor y los suyos exhibieron ayer. Carcajadas y un bidón con hielo y agua fría cuyo contenido bañó al plantel y al cuerpo técnico recordaba ese efecto revitalizante que tienen las victorias, que pintan la vida de otro color.

Desde el 3 y el 6 de marzo de 2016 no celebraba Heliópolis dos triunfos seguidos de su equipo y, como en esta ocasión, lo hizo dejando su portería a cero en ambos choques. Fue en un 0-3 ante el Espanyol y un 2-0 contra el Granada en las jornadas 28 y 29 de la 2015/2016. Adán, con su parada en el mano a mano ante Bongonda y la posterior intervención ante Jozabed logró sumar 180 minutos imbatido por primera vez esta campaña.

Todo ello, con un buen fútbol, lo que demuestra que meterse todo el partido en la cueva no es sinónimo de defender bien y que ser protagonista no obliga a descuidar la retaguardia.

Así, con este pequeño pero muy necesitado impulso anímico, encara el Betis las cinco últimas jornadas. En sólo 48 horas llegará el próximo duelo, otra vez lejos del Benito Villamarín, para visitar a un Athletic contra el que buscará un tres de tres que supondría la mejor racha verdiblanca en más de cinco años.

Y es que desde la lejana 2011/2012 no encadena el Betis tres triunfos consecutivos en Primera división. Entonces, con Pepe Mel en el banquillo de La Palmera, el Betis se impuso al Valencia, por 2-1 y con un doblete de Rubén Castro, en la jornada 16; al Atlético de Madrid, en la 17, por un 0-2 con tantos de Pozuelo y Roque Santa Cruz; y al Sporting en la jornada 18, en el primer partido de 2012, con otro 2-0 y tantos del paraguayo y de Molina aquel 8 de enero de 2012.

Ni logrando ganar al cuadro vasco y sumando el 12 de 12, conseguiría el Betis optar a una novena plaza que le queda a 12 puntos de distancia a falta de 15 por jugar. Eso sí, aunque no pueda optar al objetivo marcado por el club, al menos sí aspira aún a igualar el papel de la 15/16, pues le faltan ocho puntos para los 45 que firmó Merino y la décima plaza, del Celta, está a siete.
Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram