El
Betis Deportivo se hizo el 'hara-kiri' ante el
Marbella, cuando, tras adelantarse al filo de la media hora y quedarse su rival con diez, todo hacía indicar que la mañana sería plácida en la Ciudad Deportiva Luis del Sol, donde se estaba viendo a un equipo muy superior técnicamente, profundo, rápido de ideas y cómodo. No obstante, la relajación y una nueva acción a balón parado pésimamente defendida al borde del descanso supuso el empate y la posterior involución de los verdiblancos, incapaces de derribar ya el muro amarillo.
En el primer tiempo, pese al tempranero aviso de
Chus Hevia tras un error en la salida del filial, dominó con holgura el conjunto de
José Juan Romero, protagonista de uno de sus mejores arranques de la temporada. Especialmente fluidos e inspirados en sus combinaciones en campo ajeno, los verdiblancos pudieron ponerse en ventaja antes del cuarto de hora. Y es que, tras una penetración hasta la cocina de
Iván Navarro,
Loren mandó a las nubes su disparo, más ajustado en el minuto 9, recogiendo un rechace de
Wilfred a tiro de
Irizo, pero estrellándose esta vez en el travesaño. El 'pichichi' marbellí, para completar la trilogía sin premio ante sus paisanos, merodeó la escuadra desde la frontal, recibiendo un pase desde el suelo del vertiginoso y desequilibrante
Roberto González.
Los visitantes respondieron con una acción personal de
Corpas, que se deshizo de
Junior y Nacho con un par de buenas bicicletas para forzar el desvío de
Pedro a córner, con un guiño del poste. Pero no fue más que un espejismo, pues el
Betis Deportivo era netamente superior, haciendo estragos sus hombres más ofensivos con su velocidad de pensamiento y ejecución. De hecho,
Iván Navarro, que anduvo cerca de hacer el 1-0 de espuela después de un ataque brillante fraguado por
Julio Alonso y Aitor, provocó el claro penalti y la consiguiente expulsión de
Catena, único amonestado hasta ese momento de los costasoleños.
Loren, con la pasmosa tranquilidad de siempre desde los once metros, abrió el marcador con un 'Panenka' ejecutado de aquella manera. Era una consecuencia justa de lo que ocurría sobre el campo.
El míster visitante,
Fernando Estévez, tuvo que reaccionar con un cambio obligatoriamente defensivo, dando entrada a
Alonso por el artillero
Ferrón, pero los ayer amarillos no tiraron ni mucho menos la toalla. Es más, cumplida la media hora, la pelota se paseó por el área pequeña en un córner sin que nadie la rematara ni despejara. Tocaba aguantar, remar y guardar la ropa lo más seca posible para intentar la machada. No parecía una tarea sencilla, porque los anfitriones se gustaban y perdonaban. Empezando por
Iván Navarro, que cabeceaba desviado totalmente solo un servicio pintiparado de
Junior (35'). A renglón seguido, Lolo evitaba que
Roberto fusilara a
Wilfred, si bien es cierto que
Alonso pudo empatar en un buen centro desde la derecha que dejó pasar
Javi Moreno, marchándose su disparo no muy lejos del poste izquierdo de
Pedro.
Y es que, pese a las diferencias que había a simple vista, ni el que tenía superioridad numérica apuntillaba ni el que estaba con diez se rendía. Tanto fue así que los de
Estévez arañaron el empate en la última acción antes del descanso, merced a una falta lateral que bota Indiano y que desvía con la puntera
Javi Moreno, con salida en falso del meta Pedro y quejas por doquier por los presuntos juego peligroso del mediocentro marbellí y fuera de juego de varios efectivos visitantes, seguramente habilitados por un defensor despistado en el segundo palo. El segundo equipo heliopolitano volvía a las andadas a balón parado.
En la reanudación, la presión alta parecía un arma inteligente por parte foránea, con el
Betis Deportivo tratando de imponerse cuanto antes, también en el marcador. Pero era difícil, porque los de
Estévez se replegaban con orden y eficacia, dejando pocos resquicios y encomendándose a la contra y el balón parado. Como ocurría en el 62, cuando un saque en largo de
Wilfred y la pasividad de la zaga verdiblanca habilitaban a
Chus Hevia, que se precipitó en el mano a mano con
Pedro. O Indiano poco después, robando en campo rival y disparando mordido desde la frontal. Ya en esta fase no se veía tan fresco de ideas al filial, que recurría demasiado pronto a los intentos lejanos (
José Irizo, Roberto...) y se desesperaba.
Incómodo y estático, el equipo de
José Juan debía tener paciencia, aunque el calor y el cansancio se tradujeron en un sinfín de imprecisiones por parte local. El míster de
Gerena arriesgaba con los cambios en busca de una reacción en los suyos, carentes de clarividencia y profundidad precisamente donde manaba libremente en el primer acto. Loren y
Nieto lo persiguieron de manera trastabillada, siendo
Aitor (71') el que acertó entre los tres palos, aunque flojo y a las manos de
Wilfred.
A nueve del final, la oportunidad más clara de la segunda mitad:
Iván Navarro caza una mala cesión de
Carlos Julio a
Wilfred, cruzando demasiado su tiro forzado y escorado, que sale lamiendo el poste. Fue lo último reseñable en Los
Bermejales, porque los intentos a la desesperada del segundo equipo bético chocaban una y otra vez contra la ordenada muralla de un
Marbella que supo evitar el naufragio, saliendo a flote y llegando a buen puerto. Para rubricar la contienda, de nuevo
Iván Navarro lo intentaría con un libre directo desde el semicírculo que se marcharía a las nubes.
Betis: Pedro; Julio Alonso, Dan Ojog, Nacho, Junior (Nieto 66'); Hinojosa; Iván Navarro, Roberto (Miguel Rodríguez 66'), José Irizo, Aitor (Tellado 77'); y Loren.
Marbella: Wilfred; Carlos Julio, Lolo, Catena, Razvan (Marcos Ruiz 46'); Javi Moreno, Indiano; Corpas, Chus Hevia, Luis Rioja (Héctor Otín 73'); y Ferrón (Alonso 30').
Árbitro: González González (balear). Expulsó por doble amarilla al marbellí Catena (27') y al heliopolitano Hinojosa (87'). Amonestó también a los locales
Nacho, Roberto, Julio Alonso y Aitor, así como a los visitantes
Razvan y Corpas.Goles: 1-0 (29') Loren, de penalti; 1-1 (45+1') Javi Moreno.
Incidencias: Unas 1.000 personas en la Ciudad Deportiva Luis del Sol de Sevilla. Mañana soleada y de temperatura agradable. Terreno de juego de césped natural en aceptables condiciones.