No es amigo Quique Setién de experimentos. Hasta la fecha, siempre que hubo bajas en una demarcación determinada, apostó por recambios naturales, más allá de que prefiriera a Tosca en vez de a Redru durante la lesión de Durmisi.
Tampoco extraña el central rumano el costado zurdo, en el que actuó bastante durante la pretemporada (por la lesión de Junior), una reubicación habitual también con su selección y en el Steaua de Bucarest. Ahora, toca encontrar soluciones en el eje de la zaga, donde Amat se queda solo.
En este sentido, a Feddal le queda todavía bastante para estar a disposición del míster debido a sus problemas en el tendón de Aquiles, al tiempo que el club no recurrió a Apelación, que falla hoy, por Mandi, tras no prosperar las alegaciones al acta, así que el franco-argelino cumple sanción mañana. La alternativa más lógica sería Tosca, si bien Javi García acabó retrasando su posición ante el Eibar tras la roja a Aïssa.
Por altura y salida de balón, el muleño, que ya ofició varias veces como central en el Zenit, encaja como solución, dejando el pivote a Camarasa o Guardado. Además, no podría tirar de Nacho (sancionado en Segunda B), siendo Junior la vía más factible del filial (reconvertido a veces por José Juan y titular en el ‘bolo’ con el Écija).
Óscar Murillo2 min lectura