Si no hay giro inesperado (e imprevisible) en los acontecimientos,
Quique Setién se sentará en el banquillo el próximo domingo para dirigir el partido ante el
Atlético de Madrid.
Pese al paupérrimo balance de los últimos partidos -dos puntos de los últimos quince en juego-, el crédito del cántabro se mantiene, aunque en el seno de la entidad y más concrétamente en el órgano de decisión formado por
Haro,
Catalán y
Serra, hay una profunda preocupación por el rumbo que han tomado los acontecimientos en las últimas semanas, agravados especialmente tras la eliminación copera y la derrota ente
Las Palmas, en las que el equipo dio una imagen de absoluto hastío.
Pese a todo, ya hay informaciones que aseguran que desde el
Betis se podría haber comenzado a sondear el mercado de entrenadores. Así,
As asegura que ya se habrían producido incluso los primeros contactos con un viejo conocido,
Juande Ramos, técnico con el que
Haro ya entabló conversaciones hasta en dos ocasiones. La primera, para sustituir a
Pepe Mel en enero de 2016, y la última, el pasado verano, cuando entró en la terna de candidatos al banquillo para este curso junto a
Quique Setién.
Su hipotética contratación, en cualquier caso, no sería nada fácil por las condiciones que ya exigió en su día el ex del
Málaga. Además, una presumible destitución de
Setién supondría un importante coste a las arcas verdiblancas, pues el cántabro tiene un contrato de tres temporadas. Así las cosas, el baile de nombres ha comenzado.