Los gestos de un líder en verdiblanco

Casi nadie discutirá a estas alturas de la película la figura de Joaquín Sánchez, eterno capitán del Betis y uno de sus futbolistas más en forma. Siempre cumple el portuense, que va a cerrar la temporada con 42-43 partidos oficiales a sus espaldas, siete goles y tres asistencias, números ni mucho menos desdeñables a las puertas de los 38 años.

Líder por méritos propios del vestuario verdiblanco, el ‘17’ tuvo gestos este domingo dignos de un análisis más profundo. Así, cuando abrió el marcador de certero cabezazo picado, pidió perdón a la afición por una temporada decepcionante en todos los sentidos, acudiendo, acto seguido, a celebrarlo con un abrazo sentido a Quique Setién que, en cierto forma, quiere premiar el esfuerzo de un entrenador que, posiblemente, viviera ayer su último partido en el Benito Villamarín, pese a tener un año más de contrato. Una manera de disculpar al santanderino, que ha dado mucho al equipo y a la entidad, asumiendo la responsabilidad los futbolistas.