No ganó. Ni falta que hizo. El Betis que ha cerrado la pretemporada ha convencido con su juego, entrega, con el protagonismo que otorga al balón... de que esta temporada sí puede ser la del salto. Sin tener completado el equipo y con tres de las piezas fundamentales en el centro del campo sin debutar (Boudebouz, Tello y Javi García, que aún no es jugador bético), los pupilos de Quique Setién volvieron a tutear a uno de los equipos más poderosos, económicamente hablando, del continente, un Inter plagado de internacionales y que se puede permitir descartes del nivel de Jovetic. Tras una fase de preparación en la que se ha ido de menos a más el balance es bueno. Falta más gol, pero también un atacante por llegar.
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