Niños y no tanto suelen vivir todos los 6 de enero el día más ilusionante del año. Al menos a eso es a lo que nuestra tradición nos ha acostumbrado. Pero hoy no será un día de Reyes cualquiera. El mejor regalo que todo aficionado al fútbol puede disfrutar (o sufrir) en Sevilla se llama derbi y ése nos llega de la mano de los Magos de Oriente.
Será un derbi más, pero, como todos, uno diferente. Distinto porque todos tienen la ilusión de ganar, los unos para seguir manteniendo su supremacía y los otros para romper el maleficio que les ha acompañado en los últimos años. Distinto para los dos técnicos, que nunca han vivido algo como esto, al menos, en la capital hispalense, ya que en sus respectivas trayectorias sí conocen de primera mano otros duelos de máxima rivalidad. Distinto para los 19 jugadores que se estrenan en este Sevilla-Betis.
Distinto... Pero también uno más para todos los béticos y sevillistas que llevan desde el mes de marzo esperando este partido. Han sido diez meses de espera, pero ya está aquí. Con todos ustedes el mejor partido del mundo.
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