Desde que el ya lejano 2 de diciembre el Sevilla ganara su último partido liguero (2-0 al Deportivo) muchas cosas han ocurrido en Nervión: el primer equipo ha cambiado de entrenador, se ha perdido un derbi, ha llegado Arana , ha vuelto Nzonzi al equipo... El conjunto hispalense sólo ha sumado un punto y ha encajado goleadas como la del Bernabéu y, sin embargo, sigue teniendo a tiro las cuatro primeras posiciones. Pocas veces una sequía puede costarle tan poco.
El Madrid volvía a pinchar ayer y aunque ahora son más en la lucha por ese ansiado cuarto puesto, los de Nervión están a sólo tres puntos. En eso es en lo único que deben pensar Montella y sus chicos, en que los objetivos marcados están ahí, tanto la Liga, como la Copa y la Champions, y en que lo pasado no cuenta. Es un nuevo comienzo.
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