El fútbol español está empeñado en acabar la temporada.
Ejemplos como el de Francia no alteran el plan marcado y el CSD ha dado un paso más al aprobar el protocolo del regreso a los entrenamientos. Pero durante este tiempo de confinamiento, los clubes ni mucho menos se han quedado de brazos cruzados.
Tanto el
Real Betis en Heliópolis como el
Sevilla F.C. en Nervión han aprovechado para avanzar en una planificación, no obstante, condicionada por la incertidumbre de un mercado que se verá afectado por la crisis.
Por ello, el fútbol también inicia ahora su particular desescalada. Ya se ve la luz al final del túnel y el trabajo se multiplica. Sobre el césped, toca recuperar el tono; y en los despachos, evaluar las consecuencias para saber qué camino espera y saber sortearlo.