Obsesionarse con algo no suele ser bueno y, aunque no parece ser el caso, el hecho de que el partido más esperado de la temporada se haya retrasado casi tres meses ha hecho que la ansiedad apriete y los futbolistas lo miren con otra cara.
Desde hace semanas, aparte de COVID-19, sólo hay una palabra que se repite en el fútbol sevillano: derbi, el derbi
Sevilla F.C. -
Real Betis. Su llegada también significa el regreso del fútbol, un deporte que nunca había estado tanto tiempo 'desaparecido' y al que los aficionados echan mucho de menos.
En las últimas etapas de la preparación por separado, los equipos afinan para llegar mejor de como acabaron. La lucha por la Champions o por recuperar el terreno perdido con Europa ahora es secundaria. Sólo interesa ganar el partido de los partidos.
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