Jesé Rodríguez, fichaje estrella del
PSG el pasado verano, no termina de adaptarse al equipo de
Unai Emery. El atacante canario sólo ha jugado tres partidos y en ninguno de ellos ha estado más de una hora sobre el césped. También es verdad que
Jesé sufrió una operación de apendicitis y una contusión en la rodilla que le han impedido jugar algún minuto más, pero a pesar de eso su rendimiento ha sido bajo cuando ha participado.
'Le Parisien' explicaba este viernes que el mayor problema del jugador es el estilo de vida que tiene en la capital francesa. Según este medio,
Jesé no está demostrando el "espíritu del
Real Madrid", equipo donde se comportó como un profesional de principio a fin.
Hay que recordar que el
PSG pagó 25 millones de euros por
Jesé y, aunque no es uno de los fichajes más caros de
Nasser Al-Khelaifi, la prensa espera de él un alto rendimiento.
Jesé aún está en un hotel de París y no tiene casa propia. Una muestra de que aún no se ha adaptado a la ciudad. Según varios medios franceses, el hotel donde vive el canario es "un palacio". Se trata del Royal Monceau, un famoso hotel de cinco estrellas de la capital gala. Esto no es la primera vez que pasa, ya que Ibrahimovic compró un hotel de
París durante su estancia en el equipo capitalino.
Jesé no vive solo en
París. Su novia,
Aurah Ruiz, vive con él. Algún medio ha llegado a decir que
Jesé le habría tenido que poner un tope salarial a su pareja, siendo este de 6.000 euros a la semana. Una muestra del estilo de vida que el futbolista está llevando. A diferencia de Madrid, Jesé no tiene en París a su grupo de amigos más allegados, con los que pasaba mucho tiempo en la capital española, sus compañeros en su grupo de música, 'Team Presi Money'.
Por otra parte, el canario tampoco se estaría "esforzando por aprender el idioma", puesto que muchos componentes del equipo son de habla hispana y no tiene dificultades para expresarse dentro del vestuario.
Si algo caracteriza a
Emery es que no da oportunidades a quien no se las merece y que no tiene problemas en 'hacerle la cruz' a un futbolista, por muy caro que haya sido su fichaje. Iago Aspas, Deulofeu o Ben Arfa son algunos ejemplos. Habrá que esperar para ver si
Jesé se aclimata a París y consigue ganarse la confianza de Unai.