Antonio Ortega, entrenador del
Diablos Rojos, tiene ilusionado al barrio de Torreblanca tras colocar a su equipo como líder del
Grupo II de Tercera Andaluza. Esa ilusión queda patente en la imagen que ilustra a este artículo, en la que se ve a los jugadores abrazando a Joaquín, portero suplente ante La Jara, pero titular en los otros tres encuentros: "
Lo primero que destaco es la unión del vestuario". Esta comunión se refleja en el encuentro de la tercera jornada ante el Marchena, donde viajaron los 22 jugadores: "
Todos entrenan a tope. Ese día me vi incapaz de dejar a nadie fuera. Comenté la posibilidad de que fuéramos todos, y así fue".
Ortega dice que las sensaciones no pueden ser mejores: "
Tenemos un buen grupo, enchufado, y que mezcla juventud y veteranía". Además, el equipo está mostrando una gran pegada, con dos goleadas por 5-1 como local: "Estamos haciendo muchos goles, eso es bueno porque también generamos ocasiones.
Vamos con mucha intensidad a los partidos porque también hemos hecho una buena pretemporada".
Un punto a su favor son las jugadas a
balón parado, gracias a las cuales ha anotado
siete de los trece tantos de su equipo. Mucha culpa de estas acciones la tiene Fernández, su ayudante: "
Estamos siendo fuertes en ese sentido ya que tenemos buenos lanzadores y cabeceadores". Y otras piezas importantes son Miguel, preparador físico, y Alfonso, fisioterapeuta: "
Ellos hacen que el equipo esté en forma y que la intensidad sea una de nuestras señas de identidad en esta temporada".
Su próximo rival, el Demo, se encuentra en mitad de tabla, aunque Ortega cree que ahora "las posiciones son relativas". "Es un equipo que nos planteará problemas y lo vamos a pasar mal.
Nosotros vamos a ganar, pero sabiendo que tendremos que exprimirnos a fondo", afirma. En cuanto al objetivo marcado, no se moja, dando como claves los conceptos de trabajo e ilusión: "Yo miro el partido a partido.
Sabemos que somos un buen equipo, pero el tiempo lo dirá".