Nico Shera, como se conoce al bicampeón del mundo en categoría masculina 90 kg de origen georgiano, cayó de "ippon Okuri-eri-jime" a tan solo unos segundos del marcador ante un rival histórico al que solo había ganado dos de los ocho combates que los habían enfrentado.
Hasta llegar a los Juegos de Tokio, donde de nuevo combatió ante el atleta del ROC (Comité Olímpico Ruso) y tercero del mundo en Bakú 2018 y Tokio 2019.
Después de vencer al sueco Marcus Nyman y al mongol Altanbagana Gantulga en el tatami olímpico del Nippon Budokan, la casa de las artes marciales, el español no pudo traspasar este escollo, que le obliga a desistir del oro y la plata pero todavía tendrá opción de optar al bronce tras la repesca.
De camino a la ansiada presea en judo, la repesca lo enfrentará también con otro conocido rival, el uzbeko Davlat Bobonov a quien se impuso recientemente en el Mundial de Budapest que proclamó al judoca español campeón universal.