Carlos Sainz pierde el duende: "Fue un desastre"

El año de Carlos Sainz en su estreno con Williams está siendo muy volátil, pues empezó mal, con problemas de adaptación y sobre todo, con muchas carreras en las que la suerte le era muy esquiva. Errores extraños propios y del equipo, golpes fortuitos y un sinfín de contratiempos. Sin embargo, en las últimas carreras parecía que el mal fario había acabado. El podio de Bakú fue un ejemplo, pero ha tenido más momentos de fortuna, sumados a su gran mejora. Hasta que en México eso se ha terminado, pues desde el principio hasta el final ha sufrido un calvario que no le ha dejado aprovechar su buen ritmo.

Desde la primera curva en la que se tocó con varios coches, culpa de salir en una zona media muy igualada (debido a la sanción de 5 puestos tras Austin), el Williams se dañó y ya no hubo forma de recuperarlo. Además, los problemas en los sensores limitadores de la velocidad le provocaron hasta dos sanciones por entrar demasiado rápido a boxes y todo eso acabó derivando en un dramático final apenas a dos vueltas del final. Por eso al madrileño no le ha quedado otra opción que asumir con entereza el drama: "Ha pasado de todo. La verdad es que fue un desastre".

Pese a todo, la sensación que tiene es de oportunidad perdida, pues sabe que tenía un buen ritmo para luchar por los puntos. Incluso pese a las vibraciones que volvían al coche inconducible o a la primera sanción de cinco segundos tras su parada, el 55 estaba metido de lleno en la refriega. Sin embargo, con la sanción penalización ya no le ha quedado más remedio que conformarse. Todo dista mucho del año pasado, cuando consiguió su última victoria con Ferrari en este Autódromo Hermanos Rodríguez tras una exhibición.

Optimista para Brasil

Ahora el campeonato entra en su recta final, empezando dentro de dos semanas en Interlagos, una oportunidad para ver si contínua la mala suerte de Sainz o si por el contrario vuelve la gran versión de las últimas semanas. Él por lo pronto es optimista, pues está en un momento en el que tiene buenas sensaciones con el coche, especialmente al clasificar, y espera salir arriba lo que le hubiera ahorrado muchos de los problemas en México. "Estoy seguro que si hoy hubiese salido séptimo o más adelante, este problema al final seguramente no nos hubiese tocado a nosotros. Al final es un problema de salir tan en mitad de parrilla, así que sí, al final la penalización de Austin es lo que nos ha costado aquí".