Apoyo a
Rubi antes del
derbi. Eso ha querido escenificar el
Betis, a través de su vicepresidente José Miguel López
Catalán, quien ha querido bajar al césped de la Ciudad Deportiva Luis del Sol ante la atenta mirada de los medios gráficos allí presentes para escenificar el encuentro que ilustra esta noticia.
Un
apretón de manos entre el
vicepresidente y el entrenador, un Joan Francesc Ferrer Sicilia '
Rubi' que hace 15 días estaba prácticamente sentenciado en su cargo y que tras sumar una victoria ante el Celta y un empate en el Santiago Bernabéu, ante el
Real Madrid, se ha ganado el sentarse este domingo en el banquillo del Benito Villamarín, en el
derbi ante el
Sevilla FC.Rubi, por tanto, no sólo cuenta ya con
el respaldo de sus jugadores, quienes se han encargado de querer dejarlo claro públicamente a lo largo de las últimas fechas, sino también de una planta noble que, como es lógico en el fútbol, se vio obligada a moverse en el mercado ante la más que evidente necesidad de que, quizá, era necesario un cambio en el banquillo.
El técnico catalán, con su trabajo, y tras haber entendido que era conveniente sacrificar a alguno de los 'jugones' para aportar
mayor solidez defensiva al equipo -el Betis es el más goleado de Primera división, junto al Leganés-, se ha ganado la confianza de todos; al menos de momento.
En lo que al entrenamiento propiamente respecta, una sesión pasada por agua en la que el canterano Francis trabajó junto al grupo. Un entrenamiento del primer plantel del Real Betis Balompié que, en todo momento, ha sido seguido atentamente en directo por el presidente
Ángel Haro, Alexis y Catalán.