Pellegrini tiene razón: el mercado de porteros está congelado, pero...

Abría la mano Manuel Pellegrini a la posibilidad de que el Betis rastree el mercado en busca de un portero, habida cuenta de que Bravo encadena lesión tras lesión (ya van cuatro desde que arrancó la 20/21) y Dani Martín no está teniendo precisamente suerte (se perderá lo que queda de temporada tras ser operado de la rodilla y en verano se rompió un tobillo con la sub 21), con lo que los cancerberos del filial Carlos Marín y Dani Rebollo se quedan como únicas alternativas a un Joel Robles que tampoco está despertando mucha confianza en esta primera mitad de curso.

El getafense se redimió en la Copa, ayudando en Gijón a la clasificación verdiblanca para octavos de final con sendos paradones a Cumic y Pablo Pérez, si bien necesita competencia para activarse (como cuando compartió demarcación con Pau López nada más aterrizar). Desvestir al Betis Deportivo tampoco se antoja la mejor opción, por lo que, utilizando la ficha del '13', en la planta noble del Benito Villamarín están estudiando las opciones que ofrece esta complicada ventana. Haría falta que saliera alguien más, por mucho que William Carvalho, Sanabria, Loren y Borja Iglesias hayan cerrado la puerta por su lado.

Todos están en el mercado si llega una buena propuesta, incluyendo a Sidnei y Juanmi, infrautilizados por lesiones y su propio rendimiento, porque los heliopolitanos precisan no ya sólo de dejar hueco, sino de enjugar un desfase salarial que supera los 15 millones de euros, si bien pueden hacerlo en verano. Por ahora, interesa que pueda llegar un portero y, si todo marcha bien, un hombre de contención, con el deseado Sokratis ya libre. Pero, como confesaba Pellegrini, el mercado bajo palos no está muy boyante en enero.

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