Es una final el próximo partido para el conjunto de Guede. Lo sabe el
malaguismo, que no ha tardado en responder, también incentivado por la inteligente iniciativa del club. Una
fiesta donde, por fin, se podría sellar de forma
matemática la permanencia.
Tendrá en frente a un
Burgos sin nada en juego.
No se fía el vestuario blanquiazul, consciente de la importancia del partido. Recuperado de las molestias, Guede podrá contar con
Ramón Enríquez, una de sus apuestas habituales en el centro del campo.
Parece que no tocará excesivas piezas respecto al once titular que tan buen resultado le dio en la pasada jornada contra el
Tenerife en el
Heliodoro Rodríguez López. Por lo tanto, continuaría
Ismael Casas como lateral y
Luis Muñoz en el centro del campo. La especial duda, el acompañante del '8'.
A continuación, el :
Pedro Martín1 min lectura
