Cada año, cuando llega la primavera, en Nervión se nota algo especial. Es una sensación que recuerda a los sevillistas
por qué su equipo es un grande de España y de Europa. Mayo es el mes de los aniversarios de los títulos más recientes, pero abril es la antesala.
En abril de 2006,
Kepa abrió la puerta de la primera semifinal europea de la historia del club; sólo unos días antes del zurdazo para el recuerdo de
Antonio Puerta. Esos momentos enseñaron al club y a su afición aquello de 'Los sueños se cumplen'; lema que fue acuñado en esa dorada década 2000-2010, pero cuya enseñanza es muy anterior.
En concreto, desde
hace ya 74 años. Un 7 de abril de
1946, el desaparecido estadio de Nervión acogió
el amistoso más especial que jamás se ha vivido en la entidad. Ese día, el barrio entero se echó a la calle y en las gradas no cabía ni un alfiler. El Sevilla,
dirigido por el mítico Ramón Encinas y comandado por los no menos legendarios Juan Arza, Araújo, Campos o Busto, entre otros, recibía al Granada en un choque para conmemorar el primer y hasta hoy único título de Liga que se exhibe en las vitrinas de la entidad.
El sueño de la Liga, del que tanto se habla hoy en día, es posible. Lo es desde hace 74 años.
Una semana antes, había aguado la fiesta en Les CortsEran otros años y el Sevilla tuvo que esperar una semana para celebrar un logro que, 74 años después, sigue siendo único. El día 31 de marzo, el equipo de Encinas se conformó con un posado para los medios gráficos antes de tomar el tren de regreso de Barcelona, donde habían aguado la fiesta que preparaba Les Corts. El Barça llegó a la última jornada de la 45/46 con sólo un punto menos que el Sevilla, al que recibía en su casa. Si ganaba, era campeón; pero
Juan Araújo, en el 7', aguó la fiesta al estadio Les Corts y al equipo culé, que sólo pudo empatar por medio de Bravo.
Un once para el recuerdoBusto, Antúnez, Villalonga, Joaquín, Herrera, Eguiluz, Alconero, Campos, Arza, López y Araújo (autor del gol clave) y Ramón Encinas posaron sobre el césped del estadio de Nervión con la Liga conquistada una semana antes en Barcelona y sus trofeos individuales en miniatura.
*
Aitor Torvisco3 min lectura
