Estadio Deportivo2 min lecturaMadrid, 9 dic (EFE).- El Movistar Estudiantes afronta este domingo una dura prueba con la visita del Valencia Basket, vigente campeón de la Liga, y con la duda de su mejor hombre, Sylven Landesberg, que no se ha podido entrenar estos días por un golpe en la mano.
Con la moral alta tras ganar esta semana al Umana Reyer Venezia, líder del Grupo C de la Liga de Campeones, con un triple sobre la bocina del alero estadounidense que les mantiene en la parte alta de la tabla, los colegiales intentarán corregir el rumbo en Liga después de la derrota en casa ante el UCAM Murcia hace siete días.
Los hombres que entrena Salva Maldonado están completando una irregular temporada en la competición doméstica, en la que suman tres triunfos, a uno de la zona de descenso, y seis derrotas, si bien cuentan con un partido menos que el resto.
De los últimos cinco partidos en ACB, el conjunto madrileño ha perdido cuatro y ganado uno mientras que su rival de mañana ha logrado encadenar cuatro triunfos con una sola derrota.
El técnico catalán ha reconocido en la previa del partido que el equipo levantino "es en principio un rival superior", aunque sus jugadores quieren "hacer un buen partido en casa".
A pesar de tener "algún problema físico" como el de Landesberg, afrontan su próximo compromiso liguero "bien anímicamente" y conscientes de que se enfrentan "al campeón ACB, un rival en principio superior" al que intentarán sorprender para mirar hacia arriba en la clasificación.
"Valencia Basket -añadió- llega de perder en Europa, pero fuerte en Liga Endesa. Estamos hablando del campeón de Liga (...) Tiene mucho potencial, un juego con muchas dificultades".
A los colegiales les está costando "mucho" hacer un partido completo ante su afición, por lo que mañana saltarán a la pista "con ese ánimo de competir bien" en busca de su cuarta victoria liguera, según su entrenador.