Estadio Deportivo4 min lecturaBarcelona, 14 mar (EFE).- El Barcelona Lassa, sin opciones de clasificarse para los 'playoff' de la Euroliga, viaja a Grecia con la difícil misión de sumar un triunfo ante el Olympiacos, el local más sólido de la competición junto al CSKA de Moscú.
Sin presión y con la ideas claras que ha transmitido Svetislav Pesic desde su llegada, el conjunto azulgrana visita el pabellón de la Paz y la Amistad, donde el equipo griego, segundo clasificado de la competición, solo ha perdido un encuentro ante el Panathinaikos.
La escuadra entrenada por Ioannis Sfairopoulos apura sus opciones para discutir la primera posición que ocupa el CSKA, una situación que contrasta con la penúltima plaza que ocupa el Barça, que lucha para eludir el farolillo rojo.
Sin embargo, los catalanes llegan con la confianza recobrada. Después de poner fin a una racha de cinco derrotas consecutivas en Europa, los de Pesic superaron con un convincente triunfo al Estrella Roja de Belgrado (88-54). Una mejora que confirmó el pasado domingo con un prestigioso triunfo en la ACB contra el Real Madrid (94-72).
Dos partidos que, junto a la victoria en la Copa del Rey, han permitido al Barcelona recuperar las sensaciones con vistas a un tramo final de temporada en el que la Liga Endesa se convierte en el único objetivo.
Mientras, Pesic afronta los próximos cinco encuentros europeos como una prueba para que su equipo carbure los automatismos, especialmente defensivos.
En los últimos partidos sus pupilos se exhibieron defensivamente y jugadores como Pau Ribas, Antes Tomic, y Thomas Heurtel, faro ofensivo del equipo con 11 puntos y 6,4 asistencias de media, dieron un paso adelante.
Enfrente tendrán la mejor defensa de la competición (73,4 puntos) que tiene en el incombustible Vassilis Spanoulis como su principal referente con 12,4 puntos y 5,3 asistencias de media.
Al desequilibrio del base griego se suma la versatilidad en la pintura de Jamel McLean (8,7 puntos) y Georgios Printezis, autor de 12 puntos y 5,5 rebotes por partido en Europa.
Para contrarrestar el físico del Olympiacos, el Barcelona no lo tendrá fácil pues no viajarán jugadores claves en la rotación como Kevin Seraphin, Rakim Sanders y Sasha Vezenkov, los tres lesionados.
La de mañana será la 23ª vez que ambas escuadras se enfrentan desde el cambio de siglo. En este lapso, el Barça ha dominado con un balance de 14 victorias en 22 partidos.El último enfrentamiento acabó esta misma temporada con un una victoria clara del Barcelona en el Palau Blaugrana (73-51).
No obstante, el reto de los catalanes es mayúsculo: no solo por ganar en una pista casi inexpugnable, sino por repetir un triunfo como visitante en la Euroliga, algo que esta temporada solo han conseguido una única vez en la pista del Khimki de Moscú a finales de 2017.