Estadio Deportivo2 min lecturaSan Sebastián, 13 dic (EFE).- El entrenador del Delteco Gipuzkoa Basket, Sergio Valdeolmillos, reconoció este jueves que su equipo ha tenido una semana dura tras la derrota ante el UCAM Murcia, aunque afronta esperanzado el partido en casa del Morabanc Andorra para luchar por el tercer triunfo de la temporada.
"El inicio de la semana fue complicado, porque la derrota fue un palo duro. Tuvimos que recomponernos y tratar de fijar aquellas cosas que ya hacemos bien para encontrarnos fuertes", declaró en San Sebastián el técnico andaluz.
Consideró que "la falta de continuidad en el juego de ataque" fue la principal causa de una derrota inesperada que ha hecho daño en el entorno del club y pidió a su plantilla "ser más continuos ofensivamente" porque saben que en defensa están "mejor".
Ahora el preparador del GBC pasa página y se centra en su visita a Andorra, el primero de los obstáculos en un final de año complicado con partidos en casa antes del 31 de diciembre ante el Barcelona y el Unicaja, es decir tres rivales europeos ante los que a priori será complicado sumar.
"No tenemos ningún vértigo al calendario porque hay que jugar contra todos. Hay que pensar en Andorra y luego analizaremos lo que venga en función de lo que hayamos hecho allí", señaló el entrenador del conjunto vasco.
Alertó del poder anotador de los bases y escoltas del conjunto pirenaico, como Ennis, Albicy o Rafa Luz, un poder que espera contrarrestar gracias a esas virtudes defensivas que, a su juicio, mantiene su equipo.
El Delteco GBC seguirá sin poder contar con el pívot Mohamed Barro, que continúa lesionado, y limita las rotaciones de jugadores altos, un bien escaso en el equipo donostiarra que cuenta con el presupuesto más bajo de la ACB.